Banco Santander SA se convirtió en la última incorporación a la larga lista de bancos investigados por los fiscales de Colonia por las controvertidas transacciones tributarias conocidas como "Cum-Ex", que pueden haber costado a los contribuyentes alemanes unos 10.000 millones de euros (US$11.500 millones).
El prestamista español confirmó el jueves que está siendo investigado y dijo que está cooperando completamente. También comenzó una investigación interna para indagar sobre las acusaciones, informó Santander en un comunicado enviado por correo electrónico. Un grupo de organizaciones de medios de comunicación de una docena de países, incluido el periódico español El Confidencial, informó la noticia anteriormente.
"Nuestro entendimiento actual es que el enfoque principal de la investigación se relaciona con ciertas actividades que se extienden desde 2007 hasta 2011 de tres ex empleados que dejaron nuestro grupo hace varios años", dijo Santander. "Hasta la fecha no hemos identificado ninguna evidencia de que las actividades investigadas involucraron a la alta gerencia o que cualquiera de los órganos de gobierno de Santander o sus filiales estaban al tanto de estas actividades".
Los investigadores alemanes están analizando el rol en las operaciones de docenas de bancos, corredoras, compañías de contabilidad y firmas de abogados, y los casos involucran a cientos de personas individuales, indicaron en junio personas que están familiarizadas con el tema. Las investigaciones incluyen transacciones realizadas por prestamistas como Barclays Plc, Goldman Sachs Group Inc., Bank of America Corp., Macquarie Group Ltd. y BNP Paribas SA, dijeron las fuentes.
Goldman indicó en junio que no estaba en conocimiento de ninguna investigación contra el banco o sus empleados. Los otros bancos se negaron a comentar o no respondieron a los mensajes en ese momento.
Muchos bancos de toda Europa y Estados Unidos participaron en algún nivel: haciendo los tratos ellos mismos, organizándolos para los clientes actuando como custodios, emitiendo certificados tributarios o financiando transacciones en la práctica. Se le conoce como "Cum-Ex", una frase en latín que significa "con-sin", una referencia a los pagos de dividendos que desaparecen en las operaciones.
La investigación, que se inició hace alrededor de cinco años, se está acelerando debido a que varios testigos han acordado cooperar.
El equipo de Colonia está trabajando en paralelo con los fiscales en Múnich y Fráncfort, y ya ha acusado a seis personas, incluidos ex banqueros de inversión en la unidad HVB de UniCredit SpA en Londres.
Las transacciones involucraron ventas al descubierto justo antes del pago de dividendos. Las compañías retuvieron impuestos sobre los dividendos y los bancos custodios emitieron certificados que los accionistas podían canjear en la oficina de impuestos en caso de un pago en exceso. En las ventas al descubierto, el banco del comprador también emitió un certificado que podría canjearse por un reembolso completo. Los fiscales dicen que en algunos casos, varias partes pueden haber emitido certificados de devolución de impuestos, multiplicando el daño.