Alemania extendió su confinamiento y endureció las restricciones al traslado mientras aumenta la presión para que el Gobierno de la canciller Angela Merkel contenga la propagación del coronavirus y acelere los programas de vacunación.
Cada día mueren cientos de personas, por lo que se han agudizado las tensiones políticas, que amenazan con empeorar en medio de una creciente ola de críticas por la estrategia del Gobierno para la distribución de una vacuna contra el covid-19.
En una acalorada reunión realizada el martes con líderes estatales, Merkel logró imponer controvertidos límites al traslado, reforzó las restricciones a las reuniones privadas y prolongó estrictas medidas de confinamiento hasta el 31 de enero, según una persona con conocimiento de las discusiones.
Pese al confinamiento que lleva semanas, las tasas de contagio se siguen duplicando con creces en Alemania. Las medidas duras tuvieron consenso.
Merkel anunciará las nuevas normativas después de una videoconferencia con los líderes de los 16 estados federales. Las autoridades aún están debatiendo qué hacer con las escuelas y las guarderías.
Europa se ha convertido en un epicentro de la pandemia desde que los casos comenzaron a aumentar nuevamente en octubre, llegando a más de 400.000 muertes relacionadas con el coronavirus y 17,3 millones de contagios. La creciente preocupación en Europa por la casi saturación de la capacidad hospitalaria y el rápido aumento de las tasas de mortalidad ya ha obligado a implementar medidas más estrictas en varios países de la región.
Funcionarios de la Administración de Merkel han dicho que están intentando acelerar la producción y distribución de vacunas. Además de la vacuna desarrollada conjuntamente por la alemana BioNTech SE, la aprobación de otros tratamientos por parte de las autoridades sanitarias europeas debería ayudar a acelerar la implementación.
De acuerdo con los últimos datos del instituto de salud pública RKI, alrededor de 317.000 personas habían sido vacunadas en Alemania hasta el mediodía del martes, poco menos del 0,4% de la población.
En Estados Unidos y Gran Bretaña la tasa de vacunados es cercana a 1,4%; en Italia y España, alrededor de 0,2%
Después de apoyar inicialmente una alianza con Francia, Italia y los Países Bajos, el ministro de Salud alemán, Jens Spahn, ha defendido la decisión de Alemania de comprar y distribuir vacunas simultáneamente entre los miembros de la UE. Dijo que era más justo para los países más pequeños que no habrían podido negociar en igualdad de condiciones con los fabricantes.
Spahn dijo el martes a la red de televisión ARD que no habría soluciones mágicas de la noche a la mañana. “Tenemos que ser realistas”, dijo. “Esto no se hará más rápido que en el verano en muchos países del mundo”.
