La BBC está en conversaciones con autoridades irlandesas y holandesas para obtener licencias que le permitan continuar transmitiendo en toda la Unión Europea en caso de un brexit sin acuerdo, según dos personas familiarizadas con el tema.
Las licencias del Reino Unido que British Broadcasting Corp., financiada por los contribuyentes, utiliza para transmitir a otros países de la UE perderán validez, a menos que el Reino Unido se retire del bloque el 29 de marzo con un acuerdo vigente.
Las empresas británicas se están preparando para la creciente posibilidad de que no sea así. La primera ministra, Theresa May, está luchando por lograr que el Parlamento apoye su acuerdo con la UE, el cual prolongaría los acuerdos de licencia de transmisión actuales durante dos años, mientras que Gran Bretaña negocia una nueva relación con su mayor socio comercial. El martes, el gabinete de May acordó intensificar los preparativos para un brexit sin acuerdo.
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La BBC aún no ha tomado una decisión final sobre las licencias de transmisión internacionales, aseguraron las personas, quienes pidieron no ser identificadas, ya que las discusiones son confidenciales.
Las compañías internacionales de medios con centros regionales en Gran Bretaña, como Discovery Inc. y NBC Universal de Comcast Corp., también han solicitado licencias de transmisión en otros lugares de la UE, a fin de salvaguardar la transmisión de sus canales en el continente.
"La BBC tiene un gran problema", aseguró David Justin, presidente de One Six International, una firma de asesoría de medios con sede en Ámsterdam. "Si el brexit es difícil, se enfrentarían a un apagón en algunos países".
Un portavoz de la BBC dijo que la organización mantendrá la situación "en estrecha revisión, a fin de garantizar que podamos continuar sirviendo a nuestras audiencias en cualquier entorno regulatorio modificado". Representantes de los reguladores de los medios de comunicación holandeses e irlandeses no comentaron inmediatamente.
El Reino Unido es el centro de transmisión de Europa, hogar de más canales que cualquier otro estado miembro de la UE. Según un estudio realizado por la firma de análisis de medios de comunicación Oliver & Ohlbaum, comisionado por el grupo de presión Commercial Broadcasters Association, las compañías internacionales de medios gastan colectivamente alrededor de 1.000 millones de libras (US$1.260 millones) al año en el Reino Unido, en cosas como contenido, instalaciones de producción y tecnología.
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Las normas de la UE dicen que los radiodifusores deben tener su oficina central, una parte importante de su fuerza laboral o un enlace ascendente satelital en el país para calificar para una licencia allí, un requisito que podría hacer que la BBC traslade algunos empleados y operaciones a la UE.
Adam Minns, director ejecutivo de Commercial Broadcasters Association, dijo que la expansión de los canales internacionales ha sido uno de los mayores impulsores del crecimiento económico y el empleo en la industria televisiva del Reino Unido.
"Pero en el futuro, si el Reino Unido no puede otorgar a un canal internacional una licencia de transmisión reconocida por otros países, será muy difícil mantener ese crecimiento en el mediano a largo plazo", aseguró Minns, quien declinó comentar la situación de la BBC.
