La prolongada batalla entre el presidente Donald Trump y CNN se intensificó el martes luego que la red de noticias por cable demandara a Trump y a sus principales colaboradores por la revocación de las credenciales de prensa de su corresponsal Jim Acosta.
La inusual medida tomada por CNN apunta a obtener una orden judicial que exija a la Casa Blanca devolver la credencial a Acosta, la cual fue revocada después de un altercado entre el corresponsal y una colaboradora de la Casa Blanca que intentaba quitarle el micrófono mientras este insistía en hacer preguntas a Trump en una conferencia de prensa la semana pasada. Trump ha calificado a la unidad de AT&T Inc. de "noticias falsas" y con frecuencia ha desacreditado a Acosta.
"Esto es sólo más grandilocuencia de CNN", dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders. La funcionaria añadió que Acosta se había "negado físicamente a entregar el micrófono de la Casa Blanca" y que "esta no es la primera vez que este reportero se niega a ceder el turno a otros periodistas".
La Casa Blanca revocó el pase de Acosta que le permite ingresar sin escolta a los terrenos de la Casa Blanca, argumentando que había puesto sus manos sobre la colaboradora, una afirmación que fue disputada por muchos de los colegas de Acosta.
"Aunque la demanda es específica de CNN y Acosta, esto podría haberle pasado a cualquiera", dijo CNN en un comunicado. "Si no se disputan, las acciones de la Casa Blanca podrían crear un peligroso efecto intimidatorio para cualquier periodista que cubra a nuestras autoridades electas".
La Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca (WHCA, por si sigla en inglés) dijo en un comunicado que apoya a CNN. "El presidente de Estados Unidos no debería dedicarse a elegir arbitrariamente a los hombres y mujeres que lo cubren", dijo Olivier Knox, presidente de la WHCA, en una declaración en Twitter.
C. P.
