Tesla Inc. retirará alrededor de 135.000 vehículos Model S y X en Estados Unidos, luego que una investigación de meses de duración realizada por el regulador de seguridad automotriz del país concluyera que sus pantallas táctiles presentan defectos.
Tesla equipó ciertos sedanes Model S de 2012 a 2018 y crossovers Model X de 2016 a 2018 con procesadores de Nvidia Corp. que son propensos a desgastarse, dijo Tesla en un informe de retiro. La falla puede conducir a la pérdida de la visualización de la imagen de la cámara trasera y otros problemas.
Tesla consterna a Wall Street con primeros resultados
A principios de este mes, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés) envió una carta a Tesla diciendo que había determinado que las fallas constituían un defecto de fabricación. Si bien la compañía no está de acuerdo con el hallazgo, iniciará voluntariamente el retiro y reemplazará los dispositivos de memoria dentro de los procesadores.
NHTSA abrió una investigación preliminar sobre el problema en junio y actualizó la investigación con un análisis de ingeniería en noviembre. La agencia había pedido a Tesla que respondiera a su hallazgo de defectos a más tardar el 27 de enero, día que el fabricante de automóviles informó sus resultados trimestrales. Su informe de retiro está fechado el 29 de enero.