Los principales jueces del Reino Unido infligieron una derrota legal sin precedentes al primer ministro del país, Boris Johnson, al calificar de ilegal su controvertida decisión de suspender el Parlamento e instaron a los legisladores a regresar al Parlamento lo antes posible.
La decisión histórica y unánime de los 11 jueces, anunciada el martes, es un impulso para los parlamentarios que buscan impedir que Johnson retire al país de la Unión Europea sin un acuerdo antes del plazo del 31 de octubre. Al limitar el poder del primer ministro para suspender el Parlamento en el futuro, los jueces también privaron a Johnson de una de sus últimas armas para forzar el brexit antes de su plazo autoimpuesto.
La decisión de prorrogar el Parlamento fue “ilegal, nula y sin efecto”, dijo la jueza Brenda Hale, presidenta de la Corte Suprema, al anunciar el fallo. La decisión de “prorrogar el Parlamento fue ilegal porque tuvo el efecto de frustrar o impedir la capacidad del Parlamento para llevar a cabo sus funciones constitucionales sin una justificación razonable”.
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Los opositores al primer ministro habían argumentado que la suspensión era una farsa que pretendía obstaculizar el escrutinio democrático. Johnson, quien se encuentra esta semana en Nueva York para intentar negociar un acuerdo revisado con líderes europeos, ahora enfrenta el desafío de lograr que el brexit pase por el Parlamento sin una mayoría, el control total sobre el calendario parlamentario, o una forma de evitar el escrutinio de los legisladores.
“Obviamente, este es un veredicto que respetaremos, y respetaremos el proceso judicial”, dijo Johnson en una entrevista de televisión transmitida de forma conjunta. “Tengo que decir que estoy totalmente en desacuerdo con lo que han señalado los jueces. No creo que sea lo correcto, pero seguiremos adelante y, por supuesto, el Parlamento regresará”.
El presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, dijo que el Parlamento se volverá a reunir a las 11:30 am del miércoles.
“Como representación de la democracia de nuestro Parlamento, la Cámara de los Comunes debe reunirse sin demora”, señaló Bercow en un comunicado.
El desafío legal a las facultades del primer ministro muestra cómo las luchas políticas en torno al brexit han llevado la constitución material británica a sus límites. También ha llevado al Poder Judicial a la incómoda posición de tener que decidir sobre un asunto de política, algo que la Corte Suprema de Gran Bretaña ha evitado en gran medida.
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El plazo para aprobar un acuerdo de salida actualmente está fijado para el 31 de octubre, y los legisladores ya aprobaron una legislación que exige a Johnson solicitar una extensión de las negociaciones con la UE hasta fines de enero. Algunos de los litigantes en este caso ya iniciaron procedimientos para garantizar que se solicite la extensión, incluso si Johnson se niega a hacerlo él mismo.
“Creo que muestra a la gente que este gobierno es totalmente incapaz de resolver la crisis del brexit”, dijo Anna Soubry, miembro del Parlamento que renunció al Partido Conservador de Johnson a principios de este año.
Jeremy Corbyn, titular del opositor Partido Laborista, y Jo Swinson, líder demócrata liberal, pidieron a Johnson que renunciara después del fallo.
Joanna Cherry, del Partido Nacionalista Escocés, dijo que si Johnson “tuviera una pizca de integridad, se retiraría antes de que lo saquen”.
ED CP
