Los gobiernos de la Unión Europea evalúan aplicar sanciones a Rusia tras su último enfrentamiento con Ucrania, aunque es improbable que se tomen medidas hasta esclarecer completamente los hechos, señaló un funcionario alemán.
El acto de equilibrio refleja las limitaciones europeas a la hora de castigar con dureza al presidente Vladimir Putin luego de aplicar una serie de sanciones, respaldadas por la canciller alemana, Angela Merkel, por la anexión rusa de la península de Crimea y su intromisión en Ucrania. Merkel pidió a Putin poner cese al conflicto en una llamada telefónica el lunes, según la Cancillería en Berlín.
Tras decretar ley marcial en algunos regiones de Ucrania, el presidente Petro Poroshenko vuelca su atención a los 23 marineros y tres barcos de la Armada capturados el domingo en un enfrentamiento cerca de Crimea.
Si bien parece que Rusia fue el principal responsable del incidente, ambas partes se culpan mutuamente y habrá que buscar más pruebas de lo sucedido, según el funcionario, quien solicitó mantener su anonimato.
"Analizaremos la posibilidad de aplicar nuevas sanciones", comentó la ministra de Asuntos Exteriores de Austria, Karin Kneissl, junto a su homólogo alemán, Heiko Maas, el martes en Berlín. "Todo depende de la investigación sobre los hechos".
Mientras Merkel no dio indicios sobre la opción de ampliar las sanciones, la mandataria y Putin discutieron la posibilidad de formar una misión investigativa integrada por expertos de seguridad fronteriza de Rusia y Ucrania, según un comunicado de la Cancillería. Algunos parlamentarios del bloque oficialista alemán, encabezado por la Unión Demócrata Cristiana, exigieron medidas más duras.
"Este tema no se puede ser descartar", declaró a la cadena de televisión DLF Norbert Roettgen, presidente de la comisión de asuntos exteriores del Parlamento alemán. "Es una de nuestras pocas herramientas".
Alexander Dobrindt, cuyo partido CSU forma parte del bloque oficialista, indicó que aplicar sanciones adicionales probablemente no sería productivo. En lugar de eso, Merkel debe encarar a Putin en la cumbre del Grupo de los 20 de esta semana en Argentina, afirmó.
"No es suficiente pedir moderación a ambas partes", manifestó Dobrindt a la prensa.