La gestión del superávit fiscal por parte del Gobierno es uno de los pilares discursivos del actual plan económico, sin embargo, se pone en duda si el superávit financiero, más allá del primario, se sostiene efectivamente en términos contables. En relación a este tema, este medio se puso en comunicación con el economista, Nicolás Campoli.
Con respecto al debate en torno al cómputo de los intereses de la deuda en pesos, Nicolás Campoli explicó: “Los ingresos del Gobierno han superado a los gastos sin contar los intereses, por eso el superávit primario es bastante elevado”.
El Gobierno mantiene el superávit financiero
Y añadió: “Con este tema de los intereses, el Gobierno actualmente tiene superávit financiero y lo que muchos critican es que una parte de los intereses en realidad se suman al capital de la deuda, entonces no se contabilizan como intereses y eso es lo que hace que haya superávit financiero”.
Frente a esa observación, Campoli planteó que no es un fenómeno exclusivo de esta gestión. “Esto pasaba cuando había deuda CER, lo que se pagaba porque aumentaba la deuda CER era mucho más a lo que se contaban de intereses porque el capital de la deuda aumentaba por la inflación”, destacó.
Disminución de la deuda
Luego, manifestó que la clave no está sólo en la contabilidad, sino en lo que ocurre con el stock de deuda: “Lo que analizamos es si en realidad la deuda de verdad estaba disminuyendo y lo que creíamos es que más allá de que hay intereses que no se cuenten por encima de la línea, efectivamente la deuda estaba disminuyendo”.
Sobre si el superávit financiero puede considerarse o no real, el economista comentó: “Sí, pero la verdad no creemos que sea lo relevante para definirse si la política fiscal en general es sustentable o no”.
Lo fundamental, según desarrolló, es la relación entre la deuda y el producto. “El Gobierno está logrando un superávit primario amplio y con eso está logrando una disminución de la deuda siempre y cuando el PIB siga creciendo”.