Tras los anuncios económicos del Gobierno, el economista Roberto Cachanosky habló con Canal E, y advirtió que la falta de confianza en el Estado limita cualquier intento de reactivación.
El entrevistado comenzó criticando el gesto del presidente Javier Milei en el Tedeum al no saludar a Jorge Macri ni a Victoria Villarruel. “En el ejército se saluda al rango, no a la persona. En política es igual: se saluda al jefe de gobierno, no a Macri; a la vicepresidenta, no a Villarruel”, expresó con firmeza. Y agregó: “Si tiene problemas personales, que los analice con su psicóloga, pero que no mezcle lo institucional con lo personal”.
Medidas sin respaldo legal y sin confianza social
Respecto de los recientes anuncios económicos del Gobierno, Cachanosky fue tajante: “Todavía falta lo más importante: una ley que proteja al que saca la plata del colchón”.
Según el economista, las dudas no giran en torno a las medidas económicas en sí, sino a la historia de inestabilidad jurídica del país. “El primero en violar las normas es el mismo Estado, no la gente”, recordó, citando como ejemplo la Ley de Intangibilidad de los Depósitos de 2001 y la posterior pesificación compulsiva.
Cachanovsky subrayó que ningún decreto ni ley blindada podrá garantizar que un futuro gobierno no revierta las decisiones actuales. “Por más que firmen esa ley con la propia sangre de los diputados, la gente no les va a creer”, afirmó.
“Este gobierno puede dar el punto inicial, pero la confianza se construye con una sucesión de gobiernos que respeten las reglas. No alcanza con uno solo”, agregó el entrevistado.
El dólar y la desconfianza como motor de consumo
Sobre el comportamiento del dólar paralelo, el economista explicó por qué no baja a los 1.000 pesos como se había proyectado. “Si el dólar llega al piso, el gobierno debería comprar y para eso tiene que emitir. Pero Milei no quiere emitir”.
La estrategia, según Cachanosky, es incentivar a que los ciudadanos “desahorren” y vuelquen sus dólares al consumo. “Quieren que la gente saque los dólares del colchón y compre una moto o una licuadora. Pero ¿cuál sería el motivo racional para consumir más desahorrando?”, se preguntó, en tono crítico.
Inflación, salarios y resistencia social
En relación con el impacto sobre los ingresos, el economista se mostró preocupado: “Si la inflación supera a los salarios, llega un momento en el cual la gente no puede vivir más”.
Cachanosky alertó sobre el riesgo de estallidos sociales. “Estos problemas te saltan en el momento menos pensado”, dijo, y opinó que el Gobierno intentará sostener la estabilidad artificial hasta octubre: “Quieren llegar a las elecciones con inflación del 1% y el dólar quieto”.
Octubre: ¿estabilidad temporal o calma precaria?
Frente al escenario electoral, el economista consideró que el Gobierno podría sostener el tipo de cambio gracias al respaldo del FMI y apoyo externo: “Desde el punto de vista cambiario podrían llegar sin sobresaltos”.
Sin embargo, el problema más complejo será el poder adquisitivo: “Otra historia es cuál es el nivel de ingreso de la gente”, finalizó.