Un "huracán" oscuro se aproxima a la Tierra, y si bien no se puede precisar la fecha en la que se formó, se cree que tiene miles de millones de años. Su aparición se debe a que una galaxia enana fue literalmente absorbida por otra más grande. Sin embargo, lejos de generar temor, científicos sostienen que puede ser benéfico.
El "huracán" se aproxima a la Tierra a 500 kilómetros por segundo, según un estudio publicado en la revista científica Physical Review. El paso de este fenómeno por nuestro Sistema Solar es una oportunidad única para investigar este tipo de materia, que no se puede ver ni tocar, y que hasta el momento sólo ha podido explicarse gracias a las fuerzas gravitacionales. Así lo informó el medio La Vanguardia.
A qué debe su nombre. Se le llama huracán a esta corriente de materia oscura por la velocidad a la que se mueve. No es el primer "huracán" de este tipo que se conoce, pero sí el más cercano al sol, y esto es lo que lo hace interesante. Se sabe que no afectará en nada a la Tierra, pero sí podría ayudar a las investigaciones sobre la materia oscura y a saber más sobre cómo viajan los objetos en el espacio.
Un grupo de científicos bautizaron a esa masa compacta detectada el año pasado gracias a la sonda espacial europea Gaia, el nombre de S1, y lo apodaron "huracán" de materia oscura (dark matter hurricane) para publicar los resultados de su investigación en revistas científicas.
En ese marco, hubo personas que entendieron que este fenómeno de materia oscura iba a impactar directamente contra nuestro planeta y hasta empezaron a hablar de un inminente apocalipsis. Sin embargo, Ciaran O'Hare, físico experto en astropartículas y materia oscura de la Universidad de Zaragoza, España y uno de los autores del estudio, llevó tranquilidad ante estas versiones, a través de su cuenta de Twitter. "Estoy tan cansado de esto", escribió el especialista.
I am so done with this pic.twitter.com/g7xejBFwZw
— Ciaran O'Hare (@cajohare) November 14, 2018
En el resumen de su descubrimiento, que fue publicado por la revista Physics, O'Hare, junto con Christopher McCabe, N. Wyn Evans, Gyuchul Myeong y Vasili Belokurov, sostienen que este "huracán de materia oscura" está formado por los remanentes de una galaxia comparable hoy a la más pequeña del Cúmulo de Fornax. El mismo pasa por las "vecindades" del Sistema Solar en sentido contrario a la rotación de la Vía Láctea y, lo que más interesa a los físicos, se cruza en la ruta del Sol.
A partir de lo observado por la sonda espacial europea Gaia, los investigadores creen que S1 abre la posibilidad de investigar con más suerte la materia oscura, que se mueve a una velocidad de 500 kilómetros por segundo.
No es exactamente el objeto de investigación del famoso Gran Colisionador de Hadrones de Ginebra, el LHC, en la frontera franco-suiza, que buscó el Bosón de Higgs, la "Partícula de Dios". Pero, de acuerdo con el físico sueco Christoffer Petersson, el bosón se desintegra en un fotón y materia oscura. Como la corriente del S1 proporciona algo que favorece la identificación ("más retrocesos nucleares de alta energía", dicen ellos), de esas partículas aún hipotéticas llamadas WIMP (por las siglas en inglés de Weakly Interacting Massive Particles), que supuestamente constituyen la materia oscura, los detectores de WIMP tendrán más probabilidades de éxito, creen O'Hare y el resto de los científicos.
Este "huracán de materia oscura" parece ser una oportunidad para detectarla, si es que por fin se logra concretamente.
F.D.S./