La larga vida de Silvio Berlusconi (86 años al morir) y su no menos extensa actividad como empresario, dirigente deportivo y político de centroderecha, con muchas sombras y escándalos en el camino, dio por tierra con la sobriedad precedente en los círculos que frecuentaba.
Todo se tornó “espectáculo”, “compraventa”, “chistes”. Quien mira con mínima atención un programa de debate político advierte la “espectacularización” de las presentaciones.
Mike Bongiorno, Raffaella Carrá, Sandra Mondaini Raimondo Vianello, entre las primeras adquisiciones. Actores, cantantes y mujeres bonitas para la “revolución” del partido berlusconiano Forza Italia, consigna de los hinchas, infaltables, entre otras 15 mil personas, frente al Duomo durante el funeral.
En el interior del maravilloso templo, la numerosa familia y los invitados, con el emir de Qatar y el premier húngaro, Viktor Orban.
En la televisión, cada tanto, el recuerdo de la familia que iniciaba con “Dolcissimo papá” y de los integrantes de su imperio mediático, agradecidos todos.
No le faltaron hijos, cinco, y nietos, 17. Hasta llegó a ser bisabuelo. De mujeres… dos esposas y la final pareja y diputada Marta Fascina, muy joven. En el medio, fiestas, “bunga-bunga” y Ruby.
Pero en el funeral de Estado la familia se presentó unida y la hija mayor, Marina, junto a Marta Fascina. Las dos mujeres se presentaron tomadas de la mano. Ahora algunos periodistas se preguntan si era por afecto y cercanía en el dolor o también como una señal para el futuro de Forza Italia, que es la tercera pata del actual gobierno, con Fratelli d’Italia (Meloni) y la Lega (Matteo Salvini).
Otra pregunta que se repite es qué sucederá con Forza Italia. Por ahora Antonio Tajani, vicepremier y ministro de Relaciones Exteriores y de la Cooperación Internacional, recibió la confianza de Marina Berlusconi. Más adelante se verá, con miras a las elecciones europeas de 2004. “Trabajaremos para reforzar el Partido Popular Europeo”, dijo el vicepemier.
La secretaria general del Partido Democrático, Elly Schlein, de oposición de centroizquierda, no faltó al funeral. El otro opositor, Giuseppe Conte (Movimento 5 Stelle), faltó a la cita.
Hace 39 años, el 13 de junio de 1984, se celebraron en Roma los funerales de Estado del secretario general del Partido Comunista (PCI), Enrico Berlinguer, fallecido el 11 de ese mes. Más de un millón de personas participó en el cortejo fúnebre, (entre ellas quien esto escribe. Figuras internacionales no faltaron; el premier chinoZiyang, el ruso Mijail Gorbachov, y el líder palestino Yasser Arafat. El diputado de derecha Giorgio Almirante, del Movimiento Social Italiano, neofascita, se acercó a dar el último saludo al adversario político. una vez que Almirante entró a Le boteghe oscure, sede del PCI.
Lutos y funerales. El 1° de julio de 1974, en Argentina, falleció el presidente Juan Perón. Miles y miles lo saludaron en la cámara ardiente.
El dirigente del Partido Radical Ricardo Balbín lo despidió con palabras inolvidables: “Un viejo adversario despide a un amigo”.
