El próximo jueves se cumplirá un mes del crimen de Valentino Blas Correas, el adolescente de 17 años asesinado por policías en un control policial.
Desde el comienzo de la investigación las pruebas contra los policías han sido contundentes y muchas de ellas probadas con pericias. Por ejemplo, ya no quedan dudas que fue el policía Lucas Gómez quien disparó la bala que impactó en el cuerpo de Blas. También confirmaron que fueron cinco balazos que pegaron en el auto, uno solo impactó en las ruedas y el resto dieron de lleno en la luneta y en la carrocería.
La investigación judicial apunta ahora a encontrar responsabilidades más allá de los cinco imputados. Allí estarán centradas las próximas novedades desde la Justicia, que se podrían confirmar mañana lunes.
Cadena de complicidades. Según pudo saber PERFIL CÓRDOBA, las nuevas imputaciones recaerían sobre policías que tuvieron algún grado de participación la noche en que mataron a Blas.
Por un lado, se apunta a los efectivos que habrían golpeado a Juan Cruz, el conductor del auto cuando fue detenido en la esquina de Chacabuco y Corrientes. En el interior del auto estaba Blas ya sin vida.
Ampliarían también las responsabilidades a más policías quienes, por diferentes motivos, no informaron del procedimiento de esa noche o, llamativamente, demoraron mucho tiempo en comunicar lo que había sucedido.
Se suman aquellos que pudieron haber colaborado para plantar el arma ‘trucha’ y ensuciar la escena.
Los investigadores analizaron una importante cantidad de pruebas, principalmente domos, cámaras de seguridad y la inspección de celulares y de comunicaciones de las frecuencias radiales de la policía.
Fuentes de la investigación afirman que están confiados en poder determinar y encontrar a quienes estén comprometidos en lo sucedido, principalmente en la cadena de complicidades que pudo haber después de los disparos .
“Vamos a buscar culpables abajo y arriba, no habrá contemplaciones” sostienen quienes están detrás de la causa.
Tampoco se descarta que haya una ampliación y se agraven las imputaciones a los ocho acusados.
Si bien en algún momento desde la fiscalía dejaron trascender que se estaba investigando y hasta analizando la posibilidad de imputar al conductor del auto donde viajaba Blas, por ahora esa probabilidad no fue ratifica da y es una incógnita saber si habrá alguna consecuencia penal para el chico que manejaba y que, según la versión de los policías, evadió el control.
Lucas Gómez y Javier Alarcón, dos de los policías detenidos, fueron sometidos el viernes a las pericias psiquiátricas, algo de rigor en el trámite judicial. Si bien no están aún los informes oficiales, este diario pudo saber que la pericia a Lucas Gómez arrojó que era “consciente de sus actos en el momento de los hechos”. Gómez está acusado de homicidio agravado, y según el peritaje fue quien disparó la bala que mató a Blas.
Los próximos pasos de la causa también estarán concentrados en una posibilidad muy concreta de extender la acusación a las cagua. Por el momento hay tres empleados administrativos imputados por abandono de persona.
Alejandro Pérez Moreno, el abogado de la familia de Blas Correas, si bien confía en la marcha de la investigación, también espera por mayores progresos.
“Estamos esperando nuevos avances en la causa, desde un principio hemos sostenido que queremos una investigación completa y que respondan todos aquellos que con sus acciones u omisiones tuvieron algo que ver con el hecho”, afirma.autoridades médicas de la clínica Acon