Instituto, entre luces y sombras

Instituto no pudo celebrar su centenario con un gran logro deportivo. Pero la fiesta que sus hinchas imaginaban en el campo de juego del “Monumental” de Alta Córdoba casi se termina concretando en la “Caldera” del Ángel Sandrín.

Allí, en el tradicional gimnasio albirrojo, el equipo de básquetbol ratificó el buen desempeño que el año pasado le había permitido llegar al Súper 4 y terminó la temporada 2017/2018 entre los cuatro mejores de la Liga Nacional. Esa actuación le otorgó el pasaporte hacia su primera experiencia internacional, la Liga Sudamericana, que completó con éxito llegando hasta la serie definitoria con Franca, que perdió 1-2 con una dignísima actuación.

El equipo que dirige Facundo Müller tuvo un destacado desempeño en las dos llaves que disputó antes del “punta y hacha” con el elenco paulista que conduce “Helinho” Rubens, dejando en el camino sucesivamente a Leones de Chile, Aguada de Uruguay y los brasileños Flamengo, Minas y Baurú.

El fútbol, el deporte en el que los directivos, socios y simpatizantes gloriosos habían puesto más expectativas, terminó siendo “la otra cara de la moneda”.

Verde en el césped

En la actual temporada 2018/2019 de la B Nacional, Instituto sólo ganó cuatro de los 12 partidos que jugó. Y eso refleja claramente por qué se encuentra en el 19º puesto de la tabla. Perdió seis partidos y empató los otros dos. Otro dato, que no es menor, es que recibió 18 tantos en contra; siendo, después de Ferro Carril Oeste (20), el segundo equipo más goleado del certamen.

¿Y arriba? No hay dudas que lo mejor de Instituto este año es la contratación de Pablo Vegetti. El centrodelantero es el goleador del torneo con nueve conquistas. Pero, ¿qué pasa cuando él no está? El equipo marcó 12 goles en el certamen, es decir que sólo tres fueron convertidos por otros jugadores. Por ende, es comprensible la preocupación de los hinchas por la posible partida del artillero, ya que hay varios equipos de Primera interesados en sus servicios. “No voy a hablar más del tema”, le dijo Vegetti a PERFIL CÓRDOBA cuando se lo consultó al respecto.

En la primera mitad del año, el sueño del ascenso había quedado trunco en el Reducido, instancia en la que “la Gloria” fue eliminado por Sarmiento de Junín.

El orgullo y la bronca de Müller

“Los campeones pudimos haber sido nosotros”. La frase se repite varias veces en la misma charla y tiene un autor excluyente: Facundo Müller. La derrota 90-94 ante Franca de Brasil todavía está muy fresca y el DT de básquetbol de Instituto no encuentra consuelo ni en la medalla de subcampeón ni en la ovación con la que 4 mil hinchas de “la Gloria” premiaron, el viernes por la noche, la dignísima actuación del equipo albirrojo en la Liga Sudamericana.

“Jugamos muy bien el primer tiempo pero en los últimos dos cuartos no pudimos parar los triples de Franca. Hicimos 90 puntos, lo que no es poca cosa, pero nos faltó defendernos mejor”, se lamentó el entrenador.

“Me dominan dos sentimientos: uno de bronca por haber dejado pasar una oportunidad y otro de orgullo por todo lo bueno que hizo el equipo”, destacó Müller.

A pesar de su amargura, el DT admitió que era difícil avizorar este presente un año y medio atrás, cuando llegó al club. “En aquel momento no me imaginaba en una final continental, pero rápidamente logramos armar un buen juego colectivo, entendiendo cuáles con las virtudes de cada uno”.

“Quizá más adelante se valore esto que hizo el equipo, pero ahora es difícil. Estuvimos en las puertas del campeonato y no pudimos ganarlo”, concluyó el técnico de “la Gloria”, que mañana debuta en la Liga Nacional 2018/2019.

La autocrítica de Klimowicz

El 2018, el año del centenario del club, lejos estuvo de ser el soñado en cuanto a lo futbolístico en Instituto. El equipo que milita en la B Nacional está 19 en la tabla de posiciones, distante de los puestos de vanguardia, y por segunda temporada consecutiva no accedió a la Copa Argentina.

Hace un par de semanas la dirigencia albirroja despidió al cuerpo técnico comandado por Darío Franco y por estas horas espera resolver detalles para anunciar oficialmente la contratación de su reemplazante, que sería Diego Cagna.

En ese contexto, el malhumor de los socios e hinchas “gloriosos” se hace sentir, más allá del momento del básquetbol; y uno de los apuntados es el gerente deportivo del club, Diego Klimowicz.

En PERFIL CÓRDOBA dialogamos sobre este presente del fútbol de Instituto con el ídolo del club que no por ello está exento de las críticas. “No es lo que quisimos desde el comienzo, seguro que no. Pretendíamos estar más arriba de la tabla y estar clasificados a la Copa Argentina. No se dio; y esas es una de las causas por las que se fue el cuerpo técnico anterior. Y ahora, para el próximo año, trabajaremos con el objetivo de estar entre los equipos que clasifican al Reducido”, explicó el “Granadero”.

Y, a propósito del cuerpo técnico, todavía no se pudo resolver la salida de Darío Franco en cuanto a trámites y deuda. Por esa razón es que no se anunció al nuevo entrenador. Todos los caminos apuntan a Diego Cagna. Sin embargo, la dilatación del tema puso a Cagna en la mira de otros clubes.

Klimowicz dijo: “No hay nada aún definido con lo del técnico. Debemos cerrar primero con Darío (Franco), tenemos tiempo. La idea es que esté para la pretemporada, que está pactada, por ahora, para el 4 de enero, salvo que pueda haber algún cambio con el técnico que venga”.

-¿Cómo has tomado las críticas hacia tu gestión?

-No sé, porque no leo mucho. Hacemos lo mejor que se puede. A veces sale y otras veces no. Claro que me gustaría estar más arriba en la tabla y vamos a seguir trabajando para eso.

-¿Te haces autocrítica?

-Siempre me hago autocrítica. A veces no salen las cosas. Armamos un plantel queriendo hacer lo mejor. Lo importante que cuando lo hicimos estábamos convencidos de que era lo mejor.