Por 15 votos a favor, dos en contra y 14 ausencias, el Concejo Deliberante aprobó una modificación del Código Electoral Municipal que define la obligatoriedad que tendrán los candidatos a ocupar la intendencia de Córdoba de participar en debates públicos. Sin embargo, a tres semanas de la megavotación que definirá al próximo jefe del Palacio 6 de Julio, concejales y tribunos de cuentas (además de gobernador y legisladores), la posibilidad de un debate ya quedó enterrada y el cambio aprobado en el Concejo regirá para la próxima elección, en 2023. Cabe recordar que los concejales peronistas no asistieron a esa sesión para no convalidar la discusión en torno a esa modificación electoral a escasas semanas de concurrir a las urnas. A falta de un debate entre los candidatos y sin un espacio institucionalizado en el que los mismos intercambien propuestas, visiones e ideas, PERFIL CORDOBA convocó a los aspirantes para que comuniquen los ejes de su plataforma en relación a la gestión económica de la comuna. A la vez, se solicitó una descripción del estado actual de la gestión financiera municipal y que analicen la evolución de la deuda pública y los criterios de financiamiento, tanto actuales como futuros.
La semana pasada respondieron a la consulta de este medio los candidatos Juan Pablo Quinteros (Encuentro Vecinal), Olga Riutort (La Fuerza de la Gente) y Laura Vilches (Frente de Izquierda). Esta semana comunicaron sus lecturas y proyectos los candidatos Rodrigo de Loredo (UCR), Luis Juez (Córdoba Cambia) y Martín Llaroyra (Hacemos por Córdoba).
RODRIGO DE LOREDO “LA DEUDA ES UNO DE LOS PRINCIPALES DESAFÍOS"
Sobre la actual gestión. “En el análisis de la situación económica y financiera de la Municipalidad de Córdoba encontramos fortalezas y debilidades que creemos importante resaltar. En primer lugar, como fortalezas, encontramos que el municipio tiene una importante flexibilidad en sus recursos, ya que el 65% del total de recursos corrientes corresponden a caudales propios del municipio, y también observamos una tendencia en superávits operativos en los últimos años. Del otro lado, encontramos una fuerte participación de erogaciones en personal en los gastos corrientes del municipio, que se ajustan por una elevada tasa de inflación y un recurrente déficit financiero en los últimos años. Como logro no se puede desconocer que el municipio ha logrado tener un programa financiero calificado que le ha permitido transitar las fluctuaciones estacionales de la recaudación accediendo al mercado en condiciones favorables respecto a otras alternativas de financiación. El riesgo es la dependencia y el elevado costo que tiene en la actualidad la utilización de las letras emitidas periódicamente. Si bien se puede considerar positivamente la refinanciación de pasivos de mediano plazo con la emisión de un bono a mayor plazo. El municipio tiene la mayor parte de su deuda en moneda extranjera, tal como ocurre en las finanzas provinciales, y por el contexto macroeconómico ello se convierte en uno de los principales desafíos para la próxima gestión”.
Sobre la deuda. “El total de la deuda financiera representa en la actualidad el 23,4% de los recursos totales presupuestados para el presente año, con un fuerte componente en moneda extranjera, que representa un 84% de la deuda total, y con vencimientos a enfrentar en los próximos 5 años. Por otro lado, la deuda financiera en pesos viene manteniéndose relativamente constante en moneda nominal, por lo que su peso relativo en dinero real viene disminuyendo en el tiempo. Si las condiciones macroeconómicas mejoran y el contexto internacional presenta escenarios más favorables al actual creemos que lograr refinanciar los vencimientos del bono en dólares con mejoras en plazo va a ser la clave para la próxima gestión, para no tener que destinar grandes cantidades de recursos en estos pasivos en detrimento de obra pública muy necesaria. La salida a los mercados externos solo puede pensarse en una mejora considerable del contexto macroeconómico actual, ya que el elevado nivel del riesgo país y la incertidumbre sobre el tipo de cambio no lo harían aconsejable ahora. Vemos muy necesario, sin embargo, el trabajo en conjunto con otras jurisdicciones para acceder a los organismos multilaterales y sus líneas crediticias para el desarrollo, que presentan condiciones inmejorables”.
Cambios. “Desde el punto de vista de los recursos se debe seguir trabajando en la eficiencia y optimización de la recaudación de cada una de las tasas que cobra el municipio, mediante la modernización de sus procesos, la sistematización y la clasificación de los contribuyentes, premiando a los contribuyentes cumplidores de forma gradual y progresiva”.
LUIS JUEZ “VAMOS A REDUCIR GASTOS INNECESARIOS"
Sobre la gestión actual. “Sabemos que la situación económica de la Municipalidad no es la mejor, los gastos se han disparado a pesar de que los servicios que presta el municipio están deteriorados y son la queja constante de vecinos. Esto, a pesar de que la actual gestión ha subido los impuestos. Nosotros pensamos lo contrario: vamos a controlar los gastos y a bajar impuestos”.
Sobre la deuda. “La deuda flotante ha crecido y eso nos preocupa. También existe una queja constante de proveedores por el atraso en los pagos y eso es una preocupación por el estado en que pueden dejar al municipio. Existe deuda que se ha tomado en dólares y teniendo en cuenta la suba que ha tenido esa moneda es un tema a tener en cuenta y del cual debemos cuidarnos, más aún, cuando la recaudación municipal es en pesos. También existe deuda que se ha tomado en el mercado local a corto y mediano plazo. Gran parte de estos vencimientos impactan en la próxima gestión. En relación a las alternativas de financiamiento, se buscarían opciones internas, para que en caso de que haya que asumir compromisos futuros, estos sean en pesos y no en dólares, ya que nuestra recaudación es en pesos y el valor del dólar va aumentando a un ritmo superior del nivel recaudatorio. Hoy existen instrumentos financieros de captación de dinero y los bancos tienen grandes ganancias y cuentan con gran cantidad de pesos prestables. Eso sí, cualquier opción de financiamiento debe ser única y exclusivamente para obras y en ningún caso para gastos corrientes. Hoy no sería una alternativa viable buscar opciones de financiamiento en mercados externos por el aumento del dólar y teniendo en cuenta que nuestra recaudación está atada al peso”.
Cambios. “Vamos a apuntar al gasto, reduciendo erogaciones innecesarias (que existen y son muchísimas) y sobre todo nos enfocaremos en gastos que se duplican como, por ejemplo, el mantenimiento de espacios públicos (corte de yuyos): se paga a empleados municipales que no tienen elementos para realizar las tareas y se abona a empresas privadas para hacer exactamente la misma tarea. Idéntica situación ocurre con el bacheo, reparación de luminarias o desobstrucción de cloacas: se paga dos veces por el mismo servicio, que además, es caro y de mala calidad.
MARTÍN LLARYORA “REDUCIREMOS UN 25% LA PLANTA POLÍTICA"
Sobre la gestión actual. “El municipio acarrea desde hace un largo tiempo un déficit estructural que golpea las cuentas públicas y que se profundizó durante el último período. El déficit fiscal pasó de ser el 3% del presupuesto municipal en 2014, al 9% en el de 2019. Lo preocupante de la profundización de este desequilibrio está en que no tiene su correlato ni en obras ni en servicios para los vecinos. Peor aún, la incurrencia de sucesivos déficits no hace más que aumentar la presión sobre los contribuyentes. Es decir, la Municipalidad gasta cada vez más, los vecinos pagan cada vez más impuestos, pero la calidad de vida en la ciudad sigue siendo la misma. Por otro lado, la ausencia de un plan de obras que mejoren el funcionamiento de la ciudad no hace más que perpetuar esta condición”.
Sobre la deuda. “La situación económica del municipio es grave. Los problemas estructurales que enfrenta la Municipalidad junto con el deterioro en las cuentas fiscales que se profundizó durante los últimos años obligan a recurrir al financiamiento a través de la deuda. Esta situación no es sostenible en un contexto en el que los mercados de deuda se encuentran cerrados para Argentina y en donde las colocaciones pueden verse perjudicadas. La deuda en sí misma no es mala, pero se convierte en un problema cuando se la utiliza para financiar gastos corrientes y no para realizar obras públicas que promuevan el desarrollo genuino de la ciudad. Otro punto problemático de la deuda está en la importancia que adquiere la deuda flotante año tras año y que el municipio no informa. Para 2017 la misma se estimó en más de $2.000 millones y representó un 50% más de la estimada para 2016. Este componente de la deuda no es más que un intento por aplazar los compromisos del municipio para que sea otro el que se haga cargo de afrontar el pago de la misma. Por otro lado, hay componentes de deuda que están ocultos y por ello será necesario auditarlos para determinar el monto adeudado y su origen, y evitar así un potencial problema que tengamos que afrontar los cordobeses en el futuro. La única opción de financiamiento hoy son los ingresos propios, de la Nación, de la Provincia y de los organismos multilaterales”.
Cambios. “Los cambios más importantes tienen que ver con la gestión por resultados, la descentralización municipal y la transparencia. Vamos a poner en marcha el mecanismo de subasta electrónica y vamos a encarar una tarea importante en materia de recaudación de tributos, para lograr vencer la evasión y la elusión fiscal. Una coordinación en la tarea de la Municipalidad y la Provincia va a permitir una disminución considerable del gasto público sin afectar ningún servicio, mejorando las prestaciones, y logrando un mayor ahorro corriente. Para superar los problemas estructurales que enfrentan las cuentas municipales entendemos que es el Municipio el que debe hacer el esfuerzo y es por eso que una de las primeras medidas que tomaremos en este sentido será reducir un 25% la planta política”.