La industria basada en el conocimiento es la economía del futuro y nuestro país tiene un enorme potencial para crecer en este sector, gran dinamizador del empleo y la economía en su conjunto.
El mercado de las empresas tecnológicas argentinas es el mundo, pero también es el mundo su competencia y de ahí la importancia de generar entornos que incentiven y promuevan la creación de nuevas empresas, que generen más y mejores empleos de calidad, bien remunerados y permitan a partir de sus exportaciones el ingreso de las divisas que tanto necesita nuestra economía.
En un país con índices preocupantes de desocupación y subocupación, nuestro sector cuenta con pleno empleo, con sueldos 30% por encima de la media y con una estimación de 25.000 puestos no cubiertos por falta de personal calificado (más de 3.000 solo en Córdoba).
Para mitigar esa situación, el Córdoba Technology Cluster junto al Gobierno de la Provincia lanzó a fin de 2019 el Programa Clip, diseñado como un programa de empleo con formación, donde se capacitarán 1.000 programadores, con una importante articulación de prácticas en las empresas durante la formación.
El gobierno abonará una beca a los participantes durante la capacitación y las empresas asumimos el compromiso de incorporar a los empleados una vez finalizado el curso. Entendemos que ese es el camino. Formar más y mejores técnicos y profesionales. Generar incentivos para facilitar el crecimiento de un sector transversal a todas las áreas productivas, que ayuden a entrar de lleno en la economía 4.0.
En ese sentido, el régimen de promoción de la industria del software, establecido en el año 2004 y vigente hasta fines de 2019 permitió la creación de más de 100.000 empleos en todo el país (12.000 en la provincia de Córdoba) a una tasa de crecimiento del 9,5% anual.
Las exportaciones del sector superan los US$ 1.700 millones, constituyendo el tercer polo exportador, siendo uno de los pocos sectores de nuestra economía con balanza positiva en comercio exterior.
El plan estratégico 2030 de la Red Federal de Polos y Clusters TICs tiene como meta llegar a 500.000 empleados en el sector (50.000 en Córdoba) y superar los US$ 10.000 millones en exportaciones (cifra similar a las previsiones para Vaca Muerta).
Para cumplir esos objetivos y posicionar a nuestro país entre los líderes mundiales de producción de tecnología es necesario sostener políticas que incentiven la inversión en I+D+i, el surgimiento de nuevas empresas y el crecimiento de las existentes.
En ese sentido, todos los sectores involucrados habíamos recibido gratamente la sanción por unanimidad en mayo 2019 de la Ley de Economía del Conocimiento, que venía a dar continuidad a la ley de promoción de la industria del software, incorporando nuevas actividades al régimen de promoción, tales como producción audiovisual, videojuegos, biotecnología, biología, bioinformática, nanotecnología, servicios profesionales de exportación, industria aeroespacial y satelital, industria 4.0, entre otros.
Para acceder y mantener los beneficios del régimen de promoción, las empresas se obligan a obtener certificaciones de calidad, hacer significativas inversiones en I+D y capacitación y/o sostener altos porcentajes de exportaciones en relación con la facturación total.
Esto permite a las empresas posicionarse en el mundo. Este sector puede crecer y sostenerse solo a base de inversión en innovación, capacitación y mejora continua.
Hoy observamos con preocupación la derogación del decreto reglamentario, pero sabemos que el gobierno estaba analizando modificaciones a la normativa y por eso no sorprendió la medida.
Esperamos que a la brevedad se publique el nuevo decreto que ponga nuevamente en vigencia la ley e instrumente los mecanismos para acceder al régimen.
Los países que tendrán mayores posibilidades de crecimiento a futuro serán aquellos que dominen la economía del conocimiento. Debemos apostar a la formación de talentos y a facilitar la transformación de ese conocimiento en riqueza.
La ley de economía del conocimiento es un instrumento en esa línea y es muy importante sostenerlo para pensar en un modelo de país a largo plazo.
Pablo Gigy es secretario del Córdoba Technology Cluster