“Estamos en un terreno de mucha incertidumbre y es muy difícil tener precisiones. Esto va cambiando día a día”, dijo esta semana el ministro de Finanzas de Córdoba, Osvaldo Giordano, en una disertación virtual organizada por el Instituto Argentina de Ejecutivos de Finanzas (Iaef). Ese planteo en buena parte explica por qué hace casi dos semanas se puso en duda el pago de sueldos y jubilaciones, mientras que finalmente el viernes pasado por la tarde se confirmó que no habrá problemas para abonar esas obligaciones en mayo. El impacto de la cuarentena por el COVID-19 obliga a un replanteo diario de todas las decisiones. Esta semana será clave en dos aspectos: primero, porque la Provincia enviará una señal a los mercados al cumplir con el pago de casi US$14 millones por capital e intereses por un bono que se pactó con una tasa de interés del 7,125%. Ese compromiso debe saldarse mañana. La otra novedad es que hacia fines de la semana se tendrá el número certero de la caída de la recaudación real. Un dato alentador en este sentido es que quienes miran la evolución diaria de la recaudación advierten que en la segunda semana de abril se moderó la caída que mostró la primera semana de este mes. En concreto, habrá caída real de la recaudación, pero menos brusca que lo que mostraban los primeros días.
Reenfoque. Con ese escenario sobre la mesa, desde la cartera de Finanzas a cargo de Giordano ya salieron a reconocer que habrá una reestructuración de la deuda y que cambian la estrategia para encarar los compromisos públicos de la Provincia, sobre todo con un 2021 más cercano, en el que habrá que afrontar vencimientos por $85 mil millones, entre amortizaciones de capital e intereses. “Lo que enfrenta Córdoba es lo que enfrentan todos los agentes económicos. Hay tres factores: una recesión de dos años, el cierre del acceso al mercado de capitales y sobre eso se agrega la crisis del coronavirus. Eso exige un replanteo. Sin estos tres factores lo de Córdoba era un tema manejable por el plazo que tenía la deuda. Córdoba tiene en 2021 vencimientos más grandes, pero con acceso al crédito ese vencimiento se podía refinanciar, no había problemas. Pero la conjunción de estos tres factores hace que hagamos un replanteo, tal como están haciendo todos los agentes económicos”, marcó Giordano.
Y siendo gráfico sobre el esquema de negociación en el que están pensando adelantó: “Hoy, quien tiene un local que alquila a un comercio y el comercio está cerrado, tiene que tener flexibilidad: ese es el diálogo que se abre con los acreedores de la Provincia, pero en términos distintos a los que pueden enfrentar otras jurisdicciones como la Nación o las provincias con problemas más estructurales que tenían antes de todos estos shocks que estamos viendo”. En esa línea afirmó que “Córdoba, con cierta flexibilidad de plazos, normalizada la situación, no tiene dificultad, tiene capacidad de ahorro de sobra para enfrentar la deuda que tiene. Pero obviamente, puestos contra la espada y la pared, hoy naturalmente estamos en problemas”.
Apoyo de Guzmán. El efecto de la pandemia y la presentación de una agresiva oferta de renegociación de la deuda por parte de la Nación acota los márgenes de maniobra y acelera los tiempos para activar una reestructuración de la deuda provincial. El propio Giordano dejó entrever que hay una bajada de línea del ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, para actuar en tándem y coordinadamente a la hora de pensar cómo resolver las deudas. De esto algo dijo Giordano y también se constató esta semana con la creación de la Unidad de Apoyo de la Sostenibilidad de la Deuda Pública Provincial. “Los contactos que he tenido con el equipo de Guzmán entienden esto y señalaron que lo de la Nación es una referencia, actuemos coordinadamente, sin hacer cosas ilógicas dentro del rumbo del país. Son conscientes que, a diferencia de Nación, Córdoba tiene acreedores distintos y son situaciones distintas. Lo lógico sería plantear un diálogo diferente que afortunadamente para el caso de Córdoba exige algún tipo de reprogramación, pero no el estrés que sí tiene que poner la Nación u otras provincias más complicadas”, completó el funcionario schiarettista.
“Seguir la línea de Nación, sin ser tan agresivos”
Una analista local, con llegada a los despachos provinciales aportó su mirada: “En principio, la idea es seguir el lineamiento de Nación sin ser tan agresivos. Lo que sí se está analizando es un reperfilamiento de la deuda en dólares que vence el año que viene, que es la más pesada. La tienen colocada afuera y entiendo que han ido abriendo líneas de conversación con bancos por si las condiciones actuales se estiran en el tiempo. Lo de la semana que viene (NdeR: por mañana, lunes 27) entra todavía en etapa de pago porque van a esperar a ver qué sale de Nación para empezar a hacer sus números”
