Con un Lionel Messi en nivel superlativo y un Dibu Martínez que apareció al final del partido como salvador, Argentina le ganó 2-1 a Australia y ya está en cuartos de final del Mundial de Qatar 2022, donde se enfrentará a Países Bajos.
Messi abrió la cuenta con un gol marca registrada, un remate sutil y al ras entre varias piernas australianas en el área.
Julián Álvarez aprovechó un grosero error del arquero australiano y anotó el segundo tanto albiceleste a los 57 minutos.
De la inestabilidad a la euforia. La Selección argentina no anduvo con rodeos y dejó claras sus intenciones al convertirse, durante los primeros 20 minutos, en el equipo dominador del juego, mostrando un mecanismo aceitado para las transiciones que generó, pero no logró encontrar los caminos necesarios para doblegar el muro defensivo que propuso Australia con todos sus jugadores en campo propio.
El mecanismo de defensa que implementó el elenco oceánico tuvo como destacada la actuación de Kye Rowles, quien fue la sombra de Messi y trató de anularlo en todo momento, lo que hizo que el juego argentino se trasladara a las bandas y resaltó el nivel de Enzo Fernández.
Con el correr de los minutos, Argentina bajó la intensidad de su juego y esto le permitió a su rival no solo disputar la tenencia del balón, sino también le agregó una cuota de protagonismo al iniciar ataques tibios por la banda derecha de la defensa de Argentina, intentando sacar provecho de las espaldas de Nahuel Molina y Rodrigo De Paul.
El encuentro se tornó de bajo vuelo e inestable en cuanto a las aspiraciones del equipo dirigido por Lionel Scaloni, pero a 10 minutos del final de la primera etapa, llegó la tranquilidad: después de una triangulación cerca del área entre Alexis Mac Allister y Nicolás Otamendi, la pelota le quedó a Messi, quien definió a colocar y firmó el 1 a 0. Un gol con su sello.
El final del partido tuvo un interesante ida y vuelta, en el cual Australia estuvo cerca de marcar la igualdad de no haber sido por un notable cierre de Lisandro Martínez, mientras que Argentina perdió la ocasión de liquidar la historia con un remate desviado de Lautaro Martínez.
Y en tiempo de descuento, apareció Dibu Martínez para evitar que el conjunto oceánico se alzara con el empate, con una impresionante atajada mano a mano frente a Garang Kuol.