Inundaciones y sequías: el fenómeno de El Niño podría prolongar la inflación alimentaria
La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos anticipó que "se espera un fortalecimiento gradual" durante los próximos seis a nueve meses que provocará un período de clima extremo.
La NOAA y Naciones Unidas alertó que las condiciones de El Niño traerán un nuevo período de clima extremo a gran parte del planeta. Ante la consulta por un nuevo fuerte período de El Niño el profesor del Instituto de Meteorología e Investigación Climática de Alemania (IMK-IFU), Harald Kunstmann, anticipó que "existe una probabilidad bastante alta (de otro fuerte período de El Niño)". El docente con sede en el Instituto de Tecnología de Karlsruhe agregó: "Si sucede, podemos esperar los mismos extremos climáticos y anomalías que generalmente se asocian con este fenómeno".
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El fenómeno climático conocido como El Niño se caracteriza por temperaturas superficiales del mar más cálidas que el promedio en el océano Pacífico central y oriental cerca del ecuador. Además, provoca inundaciones en América, tormentas tropicales en el Pacífico y sequías en muchas otras partes del mundo, incluido el sur de África.
Estas consecuencias climáticas impactan directamente en la agricultura, la pesca y demás sectores de la economía. Según los científicos advierten que este año podría superar las consecuencias ocasionadas por este fenómeno en 2016 cuando alcanzó el índice más alto jamás registrado.
Según los investigadores de la unidad de observación Copernicus de la Tierra la temperatura del aire en la superficie global aumentó 1,5 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales por primera vez. Este es el límite que los líderes mundiales acordaron poner al calentamiento global en la cumbre climática de París de 2015.
En relación con esta información Kunstmann explicó, en diálogo con la agencia alemana DW, que "es muy inusual acercarse al límite de temperatura de 1,5 grados centígrados en junio". "Por lo tanto, es probable que pronto superemos este límite, no solo por unas pocas semanas sino por un período de tiempo más largo", concluyó.
Las consecuencias económicas de las temporadas anteriores de El Niño continuaron, incluso, después de pasadas las condiciones climáticas más extremas. Según el Dartmouth College de Estados Unidos, las consecuencias de este fenómeno en 1982/83 provocó un efecto financiero que alcanzó un total de 4.1 billones de dólares.
Mientras que, según el artículo de la revista estadounidense Science, los investigadores señalaron que después de la temporada de El Niño de 1997-1998, el daño al crecimiento económico mundial ascendió a los 5,7 billones de dólares.
Por su parte, los expertos de Dartmouth encontraron que los eventos de El Niño de 1982-1983 y 1997-1998 redujeron el producto interno bruto (PIB) de Estados Unidos en aproximadamente un 3 % en 1988 y 2003. Países como Perú e Indonesia, donde la agricultura supone hasta el 15 por ciento del PBI, sufrieron una caída del 10 % en 2003.
En la misma línea, los investigadores de Dartmouth estimaron que los efectos económicos negativos de la última temporada de El Niño podrían alcanzar los 3 billones de dólares entre ahora y 2029.
Crisis alimenticia y energética
Según la agencia Bloomberg Economics los registros anteriores de El Niño provocaron una fluctuación de casi 4 puntos porcentuales a los precios de las materias primas no energéticas y 3,5 puntos a los precios del petróleo. Lo que provocó un debilitamiento en la seguridad alimentaria mundial.
Por otra parte y ante la advertencia de un posible fenómeno más cálido y costoso en términos económicos, los analistas anticipan un incremento inflacionario de los alimentos.
Aumentos por anticipado
Entre la Pandemia del covid-19 y el fenómeno climático de El Niño lejos quedó el objetivo de inflación del 2% establecido por los bancos centrales de Estados Unidos y Europa.
Alimentos como el café, el azúcar y el cacao aumentaron considerablemente en las últimas semanas, según Deutsche Bank, el mayor prestamista privado de Alemania. Sin embargo, no serán los únicos. Según especialistas, se espera que otros productos básicos alimentarios se sumen a este incremento para anticiparse a las próximas cosechas.
El aumento de los precios "podría tener un efecto particularmente negativo en los mercados emergentes, donde normalmente los alimentos representan al menos un tercio del gasto del consumidor. Su posición geográfica también los deja más expuestos a los cambios climáticos, como las inundaciones, que son más probables con El Niño", concluyeron los analistas de Deutsche Bank.
