Luego de mantener una reunión con la cúpula de la Confederación General del Trabajo (CGT), el secretario de Trabajo, Julio Cordero, recibió al "Grupo de los Seis" para conversar sobre la reforma laboral y anticipó que realizará un encuentro tripartito entre las cámaras empresariales y los referentes sindicales.
La idea detrás del cónclave con empresarios era fortalecer el diálogo en el marco del Consejo de Mayo. En tal sentido, Cordero subrayó que el careo giró entorno a una "agenda abierta con un fuerte eje en la creación de empleo en todo el país”.
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El Gobierno abona una mesa tripartita con empresarios y gremialistas
"Desde el ministerio de Capital Humano que conduce Sandra Petovello convocaremos para la semana próxima a empleadores y trabajadores para que se reúnan en una mesa tripartita donde se puedan discutir todos los temas sectoriales en el marco del diálogo social”, adelantó el funcionario nacional.
Según la versión oficial, el empresariado emitió "una señal positiva de compromiso con el diálogo, el consenso, con el país, y con la generación de empleo en el marco de las políticas que lleva adelante el gobierno nacional”.
En cuanto a la reunión entre representantes del Gobierno, la Secretaría de Trabajo comunicó que en los próximos días dará a conocer la fecha definitiva y, al mismo tiempo, que le darán "una fuerte impronta federal a través del Consejo Federal del Trabajo".
En representación del sector empresario asistieron Natalio Mario Grinman, de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC); Adelmo Gabbi, de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires (BCBA); Ignacio Weiss, de la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO); Daniel Funes de Rioja, de la Unión Industrial Argentina (UIA); Marcos Pereda, de la Sociedad Rural Argentina (SRA); y Andrés Walls, de la Asociación de Bancos Argentinos (ADEBA).

Por su parte, Julio Cordero estuvo acompañado por Martin Huidobro, Subsecretario de Trabajo; María Eugenia Cortona, Subsecretaria de Empleo; Alexandra Biasutti, Subsecretaria de Seguridad Social y Claudio Aquino, Director Nacional de Asuntos Sindicales.
Vale recordar que la semana pasada, Cordero y su equipo se reunieron con autoridades de la CGT para avanzar en la conformación de una mesa de diálogo a fin de abordar diferentes temáticas que giren en torno al trabajo y las reformas laborales que pretende llevar adelante el oficialismo.
Durante el encuentro, el secretario de Trabajo explicó que la instancia de plática estará centrada en temáticas como "la modernización laboral, la educación para el trabajo y el fomento del empleo”. Por la central gremial participaron Héctor Daer, Carlos Acuña, Andrés Rodríguez, José Luis Lingeri, Gerardo Martínez, Armando Cavalieri, Maia Volcovinsky, Abel Furlán, Jorge Sola y Noemí Ruiz.
Salario mínimo y Ganancias: los factores que tensan el vínculo entre Gobierno y gremios
Las cumbres de los funcionarios del Ministerio de Capital Humano con empresarios y gremialistas se dan en un contexto de tensión respecto a tres motivos: la reforma laboral, la restitución de la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias y el fracaso de las negociaciones por la actualización del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVyM).
El segundo punto, contemplado en la reforma fiscal aprobada por el Congreso de la Nación, tensionó el zigzagueante vínculo entre el Gobierno y el universo sindical. Bajo el lema "el salario no es ganancia", varios gremios como la Asociación Bancaria y la Asociación Profesional del Servicio Exterior de la Nación (APSEN) anunciaron que presentarán acciones legales para frenar la reversión del tributo que había sido eliminado por ley en septiembre del año pasado.
En simultáneo, los sindicatos rechazaron de forma terminante el ofrecimiento de las cámaras empresarias en el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil y señalaron que se trató de "una farsa que va en línea con la política de este gobierno que es sacrificar el salario, establecer una economía absolutamente detenida, sin avances".
Tanto la CGT como la CTA Autónoma y la CTA de los Trabajadores proponían un incremento $482.000 para julio y $505.000 para agosto, lo que reflejaría una suba de 116%. La estrategia era que la remuneración mínima supera a la línea de indigencia, que en junio fue de $393.319.
Por el contrario, las cámaras que nuclean a las empresas plantearon que el ajuste se realice en base al Índice de Precios al Consumidor (IPC). Por lo tanto, la remuneración base se elevaría a $245.000 en julio, $253.000 en agosto, $259.000 en septiembre y $264.000 para octubre.
Al fracasar las negociaciones entre las partes, el Gobierno volverá a laudar. En otras palabras, una vez más fijará por decreto el aumento del salario mínimo. En la actualidad asciende a $234.315,12 y la última actualización data de mayo. Datos aportados por el Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (CIFRA) señalan que el SMVyM "tiene un poder de compra 32,1% menor del que tenía en noviembre de 2023".
MFN CP