Entre festejos por la calificación de mercado emergente, Lebac y la estrategia para encontrar un nuevo valor del dólar más cercano a $ 27, el nuevo presidente del Banco Central, Luis Caputo, fue sumando integrantes a su equipo y mantuvo las reuniones de presentanción de rigor con los distintos sectores.
Un día antes de su primer test en la renovación de Lebac –donde subió la tasa a 47% para mantener el 60% de las letras–, Caputo se reunió con Eduardo Levy Yeyati, Miguel Angel Broda, Daniel Artana y Miguel Kiguel para dar detalles de las nuevas medidas. Allí estuvo acompañado por Gustavo Cañonero, el ex SBS Group que se sumó al directorio del Banco Central, un organismo “independiente” del Ejecutivo y pese a sus advertencias sobre la pérdida de credibilidad de Cambiemos en sus últimas semanas en el sector privado.
En una presentación del SBS Group de las últimas semanas, Cañonero detallaba que si bien la economía local crecía y superaba los máximos previos, también comenzaba a mostrar señales de desaceleración, con el mercado de trabajo alineado a ese nuevo ritmo a la baja.
Elecciones. Antes se subirse al barco, el ejecutivo marcaba que “los eventos recientes habían golpeado directamente en el centro de uno de los principales activos del Gobierno: la confianza”.
Sobre la base de los datos de caída en la confianza de los consumidores y de las condiciones presentes y expectativas futuras que mide la Universidad Torcuato Di Tella, el flamante director del BCRA marcaba que “Cambiemos tiene un año para reconquistar al electorado”.
“El daño a la confianza en el Gobierno fue significativo y los votantes del Conurbano van sintiéndose cada vez más alejados”, remarcaba en una presentación de SBS Fondos antes de la firma del acuerdo con el FMI. En ese momento también pronosticaba un crecimiento del 1% del PBI para este año y del 1,5%, tasas de Lebac a 33% a fin de año y un dólar –en ese momento– a $ 27 en diciembre.
Inflación. Tampoco escondía las críticas a Federico Sturzenegger, el ex presidente del BCRA. “Mientras tanto, la realidad se sigue alejando de los objetivos del Banco Central y obliga a una nueva cuota de cautela”, remarcaba al analizar variables como la inflación general y la núcleo.
“Habrá que esperar a la primera mitad de 2019 para ver la verdadera habilidad del Central para bajar la inflación sin shocks”, vaticinaba entonces sobre la tarea que ahora recae en sí mismo y su colega Caputo, a quien asistió en la colocación de BOTE donde uno de los principales inversores fue Franklin Templeton, asociado a SBS en algunos fondos de inversión.
A la espera de ver cómo impacta la caída de la actividad en los ingresos fiscales, Cañonero marcaba que el Gobierno seguiría adelante con el ajuste. Tampoco Caputo la tenía fácil al frente de Finanzas según la interpretción del ahora ex SBS. “Completar el programa financiero no será nada sencillo, incluso con la ayuda del Fondo, pero el combo debiera ser una mejora sustancial”, anticipaba sobre el cálculo de US$ 40 mil millones de dólares en necesidades de financiamiento durante 2018 y también en 2019.
Suba extra para bancarios
El secretario general de la Asociación Bancaria (AB), Sergio Palazzo, y el presidente de la cámara empresaria Adeba, Jorge Brito (h), acordaron este viernes un aumento salarial adicional del 5 por ciento sobre las remuneraciones de los trabajadores a partir del 1° de julio próximo, por lo que las partes comenzaron a aplicar la cláusula de actualización.
Las fuentes gremiales aseguraron que la Bancaria logró de esa forma “una mejora anual real del 24,43 por ciento” sobre los salarios de los trabajadores. Se trata de uno de los primeros gremios que cierra un acuerdo extra tras la disparada de la inflación por la devaluación.