Kristalina Georgieva, flamante directora gerenta del Fondo Monetario Internacional, anticipó este jueves 17 de octubre en conferencia de prensa que el organismo esperará a conocer el plan económico del próximo Gobierno antes de renegociar el acuerdo "stand-by" firmado con Argentina en junio de 2018 por 57.000 millones de dólares.
"El Fondo está totalmente comprometido en trabajar con la Argentina para asegurar que haya mejoras en las políticas que conduzcan a una mejora en la calidad de la vida de la gente", afirmó la búlgara ante una pregunta de una corresponsal argentina sobre el futuro del acuerdo y la flexibilidad del Fondo ante futuras negociaciones.
De qué depende el desembolso del FMI y qué pasa si no llega a tiempo
"Estamos muy comprometidos en el avance del país y puedo asegurar que la voluntad del FMI de respaldar a la Argentina era fuerte cuando Christine Lagarde conducía el Fondo y es fuerte ahora que me encargo yo", agregó la funcionaria del organismo. Georgieva luego sostuvo: "Estaremos muy interesados en ver cuál es el marco de política que se establece, y cuando tengamos eso podemos continuar esta conversación".
Georgieva reconoció así lo que en Casa Rosada ya se admitía abiertamente en las últimas semanas: que el Fondo esperará a las elecciones generales del domingo 27 de octubre para comenzar a dialogar con el futuro presidente. Cargo que, si se repiten los resultados de las PASO como indican la mayoría de las encuestas, ocupará Alberto Fernández.
Si gana Fernández, los mercados no temen otra corrida pero sí una transición difícil
Tras el resultado adverso para el oficialismo en las primarias, el FMI adoptó una postura cautelosa sobre la Argentina. Si antes del 11 de agosto respaldaban todas las decisiones de Mauricio Macri, luego de ese día el organismo pasó a no opinar sobre el tema. En particular, no hubo apoyo ante las medidas de alivio que anunció el nuevo ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, cuyo costo fiscal contradecía lo firmado en el acuerdo.
La preocupación del Gobierno se enfocó entonces en el último desembolso del préstamo, de 5.400 millones de dólares, que debía llegar a mediados de septiembre de 2019. A menos de dos semanas de las elecciones, la última misión del equipo económico en Washington no logró que los fondos se liberen.
F.F.