ECONOMIA
Sin retenciones

Las pymes regionales piden bajar la carga fiscal sobre los sectores productivos

Desde CAME, entidad que representa a la pequeña y mediana empresa, se advierte sobre la falta de rentabilidad por suba de costos y presión impositiva.

Exportaciones argentinas.
Exportaciones argentinas. | Noticias Argentinas

Las pequeñas y medianas empresas de distintos sectores del país elevaron su voz de advertencia sobre el peso de la carga tributaria en las distintas regiones del país, especialmente por la gran superposición de impuestos y por los niveles de retenciones, aunque en las últimas horas el Poder Ejecutivo aplicó algunas medidas para aliviar el peso de los aranceles.

En las últimas horas, la Confederación de la Mediana Empresa (CAME), advirtió en un informe que “la rentabilidad de los productores pymes se ve afectada por la elevada carga impositiva y la permanente suba de costos”.  

Para que las economías regionales puedan desplegar todo su potencial, generando divisas y empleo genuino en el interior del país, es imprescindible que el Gobierno nacional tome la decisión de eliminar las retenciones a las exportaciones”, recalcó el comunicado de la entidad empresaria.

En ese sentido, explicó que la rentabilidad de las economías regionales se está viendo afectada por varios motivos y cita como ejemplo, los combustibles que aumentaron un 15% entre agosto y diciembre pasado, los insumos que registran subas por encima de la inflación, acompañando en muchos casos el dólar “Bolsa”, y la brecha cambiaria -en torno al 90%- “la cual dificulta cualquier proyecto productivo a mediano y largo plazo”. 

“En los últimos días, el Gobierno, mediante el Decreto 1060/20, modificó más de 4.500 posiciones arancelarias. Si bien en algunos productos se bajaron los derechos de exportación, en otros el impuesto registró un aumento, poniendo en jaque la rentabilidad de la producción primaria en los diferentes complejos”, destacó CAME.

 

 

Se detalla que la medida establece, por ejemplo, una eliminación de la alícuota en el caso del jugo de manzana y, al mismo tiempo, una suba al 4,5% para el jugo de pera.

No entendemos el criterio que se adoptó para bajar las retenciones en unos productos y subirlas en otros”, advirtió Pablo Vernengo, director ejecutivo de la entidad.

“Los productores necesitan rentabilidad para poder dar un salto cualitativo y transformar materias primas en productos finales. Para esto es imprescindible reducir la carga impositiva y eliminar los costos de intermediación que encarecen los precios de los alimentos tanto en el mercado doméstico como el externo”, agregó Vernengo.  

Además, remarcó que las economías regionales necesitan un enfoque integral adaptado a la realidad de cada complejo. “Hay producciones que deben afrontar mayores costos (logísticos, salariales, producción y protocolos COVID-19) y las retenciones sólo sirven para quitarle incentivos a los productores”, afirmó.   

Un informe realizado por CAME, el Monitor de Exportaciones de Economías Regionales, muestra que las economías regionales tienen potencial para duplicar a mediano y largo plazo el valor de sus exportaciones al mundo, pasando de los actuales 7.200 millones de dólares por año a más de 14.000 millones de dólares. 

 

En 2020 más de 7 de cada 10 dólares que ingresaron al país provinieron de la cadena agroindustrial.

El sector representó el 74% del valor del total de las exportaciones del país (la relación más alta de los últimos 5 años).   

Vernengo destacó, también, que aumentar las exportaciones es importante para el país ya que posibilita el ingreso de divisas, inyectando dinamismos en todos los actores de la cadena de valor, haciendo crecer el empleo genuino y el poder adquisitivo de los trabajadores.  

Una de las mayores tendencias mundiales del consumidor es la demanda de productos listos para consumir. Pero agregar valor en origen a la producción primaria supone el desafío de tener una mirada integradora y un rol protagónico por parte del Estado.   

Entre los diversos complejos productivos que se destacan por tener un gran potencial de crecimiento en exportaciones se cuentan, entre otros, legumbres, cítricos, olivícola, apícola, maní, arroz, peras, manzanas, uvas, lácteos, yerba, carnes, madera y vinos.  

 

"La presión tributaria ha crecido notablemente, hubo 14 modificaciones impositivas, ya sea por aumento de alícuotas o mismo también por la aplicación de nuevo gravámenes", Cesar Litvin.

 

A todo esto, muchos tributaristas coinciden en que existe una "maraña impositiva" que tiene el país, que abarca en total en este momento a unos 170 gravámenes a nivel nacional, provincial y municipal.

Precisamente, César Litvin, catedrático y tributarista recalcó que la presión tributaria sobre los sectores económicos del país "está muy al límite".

"La presión tributaria ha crecido notablemente, hubo 14 modificaciones impositivas, ya sea por aumento de alícuotas o mismo también por la aplicación de nuevo gravámenes", subrayó.

Para el tributarista, Argentina va a contramano de lo que están haciendo muchos países en medio de la pandemia para atraer inversiones.

"Con la situación actual que tiene el mundo, una gran cantidad de países están bajando impuestos para atraer inversiones. Argentina tiene graves problemas para atraer inversiones. La única forma para generar movilidad social y reducir los niveles de pobreza es con educación e inversión", concluyó.

LR