Allá por el año 2008, Marillion, una legendaria banda de rock hechó a andar la idea del crowdfunding para juntar fondos y salir de gira; y gracias al micro aporte de miles de fans lograron financiarse. El método también fue usado por el ex presidente norteamericano Barack Obama para su segunda campaña a presidente, a tal punto que el crowdfunding comenzó a mover mucho dinero en el mundo porque desde el punto de vista del aportante, el costo es bajo y con el espaldarazo de la tecnología se puede reunir el aporte de muchísimas personas.
La tecnología es la gran responsable del salto del crowdfunding. “Jamás se podría haber accedido a esta metodología sin los avances tecnológicos que hay en la actualidad”, explica Sofía Gancedo que lidera Bricksave, una plataforma de crowdfunding inmobiliario que está bien empapada en el tema.
De hecho, arrancó por el año 2016, cuando todavía el tema estaba literalmente "en formación".
Hoy, el crowdfunding es una de las aristas con más potencial en el mundo fintech en el que se destacan empresas que crecen vertiginosamente. Y si bien el tema de pagos digitales es el área de mayor expansión, otras como los seguros y el crowdfunding tienen mucho potencial para desarrollarse.
Tal como se ve, en el mercado aparecen distintas posibilidades de crowdfunding, pero todas tienen en común que trabajan con alguna plataforma en la cual se concentra la actividad. De esta manera aparecen alternativas para reunir dinero para donaciones, con algún fin específico o bien para invertir en un activo. En ocasiones también se utiliza para apalancar startups o empresas que están arrancando y que necesitan inyección de capital, aunque en estos casos con mayor nivel de riesgo.
“Nosotros lo utilizamos para que los inversores reciban una parte de la propiedad de un activo, y si el inmueble se alquila, perciban una ganancia en proporción de su aporte; o bien en caso de venta, la parte respectiva y su apreciación, si existió”, explica Gancedo.
Como dato interesante destaca el fuerte nivel de reinversión entre sus clientes. “En los últimos dos años, de la base actual de inversores, siete de cada diez decidieron reinvertir”, detalló y recordó que ofrecen rentabilidades promedio anuales que rondan el 9% en dólares.
“Es extremadamente importante para nosotros haber logrado una tasa de reinversión tan alta. Las personas tienden a ser muy cautelosas al invertir, por lo que es una satisfacción aún mayor que confíen continuamente en nuestra plataforma”, destacó.
—¿Cuándo arrancaron en la región?
—Nosotros fuimos la primer plataforma de crowdfunding inmobiliario en Latinoamérica en 2016 y seguimos siendo la más grande para inversiones en el mundo.
—¿Cuántas personas invierten en esta plataforma?
—Tenemos más de 20 mil registrados y alrededor de 2500 inversiones activas.
—¿Dónde suelen invertir?
—Brindamos acceso a diferentes oportunidades inmobiliarias en ciudades como Miami, Chicago, Detroit, Valencia, Nueva York y Viena, entre otras muchas ciudades de todo el mundo. Nos dedicamos a juntar dinero de inversores, en general latinoamericanos, que quieren invertir en Real Estate a nivel global. Con nuestro modelo de negocios podemos disminuir los costos de inversión el máximo posible.
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—¿Hay que reunir requisitos especiales para invertir?
—Cualquiera puede invertir desde casa de forma ágil y muy sencilla, a partir de aportes de 1.000 dólares y obtener retornos mensuales a través de billeteras digitales, las 24 horas del día y los 7 días de la semana. Por ahora. el mínimo es de 1000 dólares, pero trabajamos para disminuirlo; porque pronto y también gracias a la tecnología, tendremos tokenizado el activo, con lo cual se van a comprar derechos de propiedad lo que agilizará la transacción. Así será posible que podamos bajar el mínimo de inversión a 10 dólares, por ejemplo.
—¿Cuál es el objetivo que mueve este negocio?
—Queremos que el sector inmobiliario sea un mercado de fácil acceso para cualquier persona que desee invertir, independientemente de que tenga o no formación en economía y finanzas. Por eso ofrecemos un modelo de negocio simple, transparente y seguro, con una reserva de valor en las ciudades más estables del mundo y un enfoque en propiedades residenciales y terminadas, lo que reduce el riesgo al mínimo.
—¿Cómo son los usuarios de esta plataforma?
—Tenemos usuarios de 19 nacionalidades distintas que realizan las inversiones a través de un tablero online muy sencillo desde cualquier parte del mundo. Además, tienen la posibilidad de monitorear sus intereses en todo momento. Es transparente, es ágil y sencillo. Al comienzo había muchos argentinos, pero ahora tenemos las oficinas en Sao Paulo y comienza a haber gente de muchos lugares del mundo.
—¿Cómo es la regulación sobre este tema en la Argentina?
—Desgraciadamente no existe una regulación que abarque perfectamente lo que hacemos. Hay prioridades en el país y lo entendemos. Argentina tiene un mercado enorme y completamente virgen, con ganas de entrar porque la gente lo entiende fácil; y por otro lado hay una regulación muy atrasada con respecto al mundo. El país tiene costos de transacción que son inéditos en cualquier parte del mundo.
—¿Qué pasó durante la pandemia?
—El año pasado fue un éxito. Logramos un crecimiento del 400% en la facturación, que llego a US$5 millones.
Un poco de historia
En cuanto a los inicios, basta con decir que Gancedo fundó Bricksave, en 2016, cuando el crowdfunding inmobiliario era un concepto incipiente. Luego, vendió el 50% de la compañía a un holding internacional que maneja un portafolio de 80 empresas.
La empresaria asegura que "la plataforma fue financiada por el Gobierno Británico y lleva más de 10 millones de dólares invertidos".
Al cerrar la charla con PERFIL confirmó que están llegando a todo Latinoamérica. "Sólo trabajamos con propiedades residenciales y terminadas. Nuestro valor agregado es único para inversores de todo el mundo”, completó.