ECONOMIA
CON 165 MIL VISITANTES Y 400 EXPOSITORES

Viaje a la megaferia en la que ‘el campo’ se abraza otra vez a Macri contra CFK

La exposición que organizan los diarios Clarín y La Nación fue una muestra de la pujanza de la cosecha récord y del respaldo al oficialismo de cara a las presidenciales.

20190317_1395_economia_CP20 Agencia Na
DE LOCAL. El presidente Mauricio Macri sonríe y se saca selfies al visitar la muestra en San Nicolás. | cedoc perfil

Hace algunos años ya que además de la exposición de la Sociedad Rural en julio, hay ocho letras que resumen el ánimo y el poder del campo, o de una parte central de él: Expoagro. Y como cada marzo, esta semana se expresó en el autódromo de San Nicolás, en el kilómetro 225 de la Ruta 9, el sector agrícola pampeano de cara a un 2019 que no vivirán como un año más. Por un lado, porque aportarán el grueso de las divisas que tanto precisa la Argentina, unos US$ 26 mil millones con una cosecha récord. Y por otro, porque como nunca dejaron claro su alineamiento político: abrazados a Cambiemos, para que no vuelva Cristina.
En otros años electorales, los políticos que iban a Expoagro eran muchos y diversos. Pero con la polarización actual, no se extrañó a Lilita Carrió, Sergio Massa,  Margarita Stolbizer o a los radicales. En la agenda de los chacareros solo parece haber lugar para dos figuras: Macri, que fue el miércoles, y Cristina Kirchner, que tiene el ingreso prohibido. Los productores de granos no perdonan la Resolución 125, once años atrás, y todo lo que siguió después.
Roberto Lavagna, Juan Manuel Urtubey, Omar Perotti y Felipe Solá, desde distintas vertientes peronistas, pasaron sin llamar la atención ni despertar pasiones. La realidad es que esta parte del campo, que produce granos que cotizan en dólares, tiene un único dilema: ante la amenaza de que vuelva Cristina al poder, inevitablemente debe cerrar filas con Mauricio.
De esto trató esta Expoagro, la más oficialista de la que se tenga memoria. Fue permanente el desfile de funcionarios que repetían una misma consigna: que el camino es el correcto y que hay que mirar para adelante para no volver al pasado. Vidal y Macri dijeron además lo que los productores querían escuchar: que las retenciones “son un mal impuesto que no queríamos aplicar” pero “no nos quedó alternativa”.
Así, el macrismo usó Expoagro para tratar de ratificar su alianza con este sector productivo. El propio Mauricio Macri, no bien bajó del helicóptero, se reunió con la Mesa de Enlace y fue directo: dijo que superar la crisis económica era su prioridad para poder volver a la senda. Luego, en público, blanqueó: “El mundo está mirando si los argentinos vamos a ratificar el rumbo o vamos a querer tomar nuevamente un atajo”. La gente de Ceremonial  alejó a otros funcionarios y colocó a su lado a Daniel Pelegrina, de la Sociedad Rural, y a Dardo Chiesa, de CRA, que se quedó con ganas de hablar de los sectores agropecuarios que andan mal, como la lechería y las economías regionales. La foto finalmente fue la de 2015: Macri y el campo, unidos contra Cristina.
Cerca. Aunque muy críticos por el regreso de retenciones, la mayoría de los productores ya masticó ese sapo y está encolumnado. En Expoagro 2019 no apareció una tercera vía, y si bien Lavagna caminó sus calles, su franqueza le jugó en contra: a la hora de hablar de retenciones espantó a los productores diciendo que no debían analizarse desde una posición ideológica, ya que solo eran una herramienta de política económica.
Para terminar de seducir al sector, el macrismo tuvo una aliada clave. La gran cosecha que esperan todos en las próximas semanas hizo las veces de lubricante. En esta Expoagro se notó entusiasmo ante la chance concreta de superar los 130 millones de toneladas. Organizada por Exponenciar, que es una empresa creada por los diarios Clarín y La Nación para la realización de este tipo de eventos tuvo 165 mil visitantes y unas 400 empresas expositoras.
Mantener entusiasmados a los productores es un objetivo clave para Macri, pero no tanto por los votos, que son pocos, sino porque necesita que vendan rápido sus cosechas pues el Banco Central necesita sus divisas para domar el dólar. Se estima que las exportaciones agrícolas esta campaña aportarán US$ 26 mil millones, pero la clave es que los productores no se sienten sobre la soja, espantados por lo que suceda más allá de sus tranqueras.
Mientras se hacía Expoagro, los caminos que conducen a los puertos del Gran Rosario comenzaron a poblarse de camiones. Así será hasta junio. Ya vendieron rápido el trigo y ahora lo están haciendo con el maíz. Pero es el poroto el que genera el 75% de los negocios.  
La reactivación del sector se notó en San Nicolás. Renace la alianza con la Casa Rosada. El jueves, de hecho, en el marco de la feria hubo una reunión secreta de la que participaron los más poderosos empresarios agrícolas del país. Hubo enviados directos del Presidente. El mensaje que transmitieron a los hombres de negocios –algunos grandes aportantes en la campaña electoral de 2015– fue que había que volver a bancar. Eran ellos o el abismo. n