Los argentinos aportaron 727 millones de dólares de los 1.397 millones de dólares que ganó Uruguay por el turismo en 2022. Esto surge del informe sobre “Turismo receptivo” que el ministerio de ese país publicó en su sitio oficial. Sí, Argentina y Uruguay tiene muchos lazos sólidos de fraternidad y además, la industria del turismo entre ambos países, es redituable.
Así como los 1.169.101 argentinos que viajaron a Uruguay gastaron allí unos 727 millones de dólares, los 1.824.203 uruguayos que hicieron turismo en Argentina en 2022, dejaron en el país, casi 659 millones de dólares.
Los lazos turísticos entre Argentina y Uruguay
Los argentinos que viajaron al Uruguay en 2022 fueron de los visitantes extranjeros que menos dinero gastaron por persona en relación con los brasileños, paraguayos, chilenos, norteamericanos e incluso europeos. Según el informe del Ministerio de Turismo uruguayo, en promedio, cada argentino gastó en el país vecino, unos 622 dólares por persona, y por día 96 dólares.
A su vez, en Argentina, el promedio de gasto de los uruguayos fue de 361 dólares por persona, con unos 73 dólares por día. Se detalla que la estadía promedio de los argentinos en Uruguay fue de casi una semana; y de uruguayos en Argentina, de cinco días.
Los turistas uruguayos gastaron en Argentina 659 millones de dólares, en 2022.
En ese ranking de los turistas que más gastaron en Uruguay, a los argentinos le siguen los norteamericanos, con 652 dólares; los europeos, con 660 dólares; los chilenos, con 694 dólares; los brasileños, con 718 dólares; y en primer lugar, los que más gastaron por persona fueron los paraguayos, con 1198 dólares.
Montevideo, Punta del Este, el Litoral Termal y Colonia, concentraron la mayor cantidad de visitantes a Uruguay durante todo 2022. La mayoría de quienes viajaron lo hicieron por turismo, seguido por quienes fueron para visitar amigos o familiares. Los hoteles fueron la opción más elegida por los turistas, con casi un 48 por ciento del total; mientras que quienes viajaron y se alojaron en viviendas propias en el país vecino representaron un 29 por ciento.
Ei / ED