La conquista del mundo de Relatos salvajes no parece cesar: la antología de Damián Szifrón, por lo pronto y en nuestras salas, ha logrado convertirse a un mes de su estreno en la película más taquillera de la historia del cine argentino, desplazando de ese podio a la ganadora del Oscar, El secreto de sus ojos, la película de Juan José Campanella. El récord de Relatos salvajes se corresponde con las 2.460.000 personas que hasta el viernes asistieron a ver la película estrenada en la Competencia Oficial de Cannes (superando así a los 2.410.592 espectadores que había logrado El secreto de sus ojos en 2009).
Por ahora, aunque viene asomando, Relatos salvajes es el éxito más grande del cine nacional del nuevo milenio pero el récord de espectadores sigue siendo, salvando las distancias temporales, de Nazareno Cruz y el lobo (3.400.000 espectadores) y El santo de la espada de Leopoldo Torre Nilsson (2.600.000: un número que debería superar cómodamente este fin de semana el film de Damián Szifrón).
La película ha sabido canalizar broncas y fantasías violentas no sólo en la sensibilidad Argentina sino en todo el planeta. No por nada acaba de alzarse, remarcando su carácter de coproducción argentino-española (con los hermanos Almodóvar –ergo, Pedro– colaborando junto a K & S, la principal responsable del film), con el Premio a la Mejor Película Europea (que otorga el público) en la reciente edición del Festival de Cine de San Sebastián. El premio fue “compartido” con The Salt of the Earth, el documental de Wim Wenders y Juliano Ribeiro Salgado. El film de Szifrón, que se estrena el 17 de octubre en España, generó varios aplausos durante y al final de su proyección y era parte de la sección Perlas.
Y todavía puede ser una gran semana para Szifrón: el martes se anunciarán las nominaciones de los Premios Sur (a lo mejor del cine nacional) y también qué películas serán enviadas para competir como Mejor Película en Idioma Extranjero en los Oscar y Mejor Película Iberoamericana de los Premios Goya de la Academia de España. Dos categorías que parece no hay dudas serán ocupadas por Relatos salvajes.
En la edición 62 del Festival de San Sebastián hubo filmes argentinos en diferentes secciones y casi como nunca. En Horizontes Latinos, había ocho filmes: la celebrada Ciencias naturales (Matías Lucchesi), La princesa de Francia (Matías Piñeiro), Jauja (Lisandro Alonso), Historia del miedo (Benjamín Naishtat), La tercera orilla (Celina Murga), Dos disparos (Martín Rejtman), Refugiado (Diego Lerman) y La salada (Juan Martín Hsu). En otra secciones del Festival donostiarra pasaron también: Una noche sin luna, una coproducción argentino-uruguaya de Germán Tejeira y el corto Enfrentar animales salvajes de Jerónimo Quevedo. Mi amiga del parque, de Ana Katz, fue parte de Cine en construcción.
En la sección Horizontes Latinos el Premio fue a la mexicana Güeros, y la Mención Especial quedó en manos de dos películas, una es la argentina Ciencias naturales y la otra Gente de Bien, coproducción argentino-colombiana. La Concha de Plata al Mejor Director fue para Carlos Vermut por Magical Girl. La Concha de Oro, premio máximo del Festival, fue para también para Vermut y Magical Girl.