Las enfermedades de la mácula o maculopatías se caracteriza por una pérdida de la visión central con borramiento de los detalles, aunque sin consecuencias en la visión periférica y afecta a casi el 30 por ciento de los mayores de 75 años. La mácula es una pequeña porción de 5 a 6 milímetros en la zona central de la retina que permite ver los detalles con claridad y realizar actividades como leer o conducir un rodado.
Las dos maculopatías que se observan con mayor frecuencia son el Edema Macular Diabético y la Degeneración Relacionada a la Edad aún no se han dilucidado por completo las causas o factores que producen ambas enfermedades, en el caso del Edema Macular Diabético se produce a causa de procesos inflamatorios y al exceso en la producción del llamado ¨Factor de crecimiento Vascular Endotelial ¨.
En cambio la etiología de la Degeneración Macular relacionada con la Edad es multifactorial, que incluye factores hereditarios (es importante conocer si sus padres o abuelos padecieron de ésta enfermedad), así como también factores ambientales, como el estilo de vida (mala alimentación, falta de ejercicio regular, y sobre todo, el tabaquismo) y factores propios del ojo en donde también existe un exceso en la producción del llamado ¨Factor de crecimiento Vascular Endotelial¨.
Síntomas iniciales: - Visión borrosa. - Incapacidad para visualizar o reconocer las caras de la gente a la distancia. - Dificultad en la transición entre ambientes luminosos a ambientes tenues. - Necesidad de luz más intensa para la lectura. - alteraciones a visualizar líneas rectas ¨Metamorfopsia¨.
Diagnóstico de las maculopatías: Es fundamental luego de los 50 años de edad o si se padece de diabetes realizar controles anuales oftalmológicos. En caso de realizarse el diagnóstico de una maculopatía será el especialista quien determinará la frecuencia de los controles. Durante el examen el oftalmólogo realizara un examen oftalmológico completo que incluye también un examen del fondo de ojo y si el lo considera necesario una tomografía de coherencia Óptica (oct) y una Retinofluoresceinografía (RFG).
Tratamiento: Es fundamental realizar cambios en el estilo de vida, entre ellos, dejar de fumar, si lo hiciera; realizar ejercicio en forma regular; así como también modificar la dieta habitual, y en el caso de los diabéticos mantener niveles de glucemia dentro de los parámetros normales para lo cual también es muy importante que concurra periódicamente al diabetólogo.
En la actualidad existen varias drogas denominadas ¨Antiangiogenicos¨ que se inyectan dentro del ojo (inyecciones intravítreas) que por lo general son realizadas en el quirófano y con anestesia tópica, cuyo objetivo bloquear el Factor de crecimiento Vascular Endotelial para frenar así la generación de los vasos anómalos que generan fluido y sangrado en la mácula.
Las drogas aprobadas en nuestro país para estos tratamientos son el Bevacizumab, el Ranibizumab, el aflibercept y la Dexametasona las cuales se comercializan con diferentes nombres comerciales y en viales ya preparados para ser inyectadas dentro del ojo. Usualmente se realizan 3 aplicaciones mensuales y, según la evolución de cada persona, se determinará la frecuencia posterior de las inyecciones.
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