Israel bombardeó con tanques y aviones el viernes tres posiciones del movimiento islamista Hamas en Gaza, después de que su ejército asegurara que manifestantes palestinos dispararon contra sus soldados en la frontera.
Hasta ahora, los enfrentamientos dejaron un saldo de quince palestinos muertos, mientras que un centenar de personas resultaron heridas en uno de los más violentos enfrentamientos de los últimos años, que estallaron cuando miles de personas protestaban en la frontera entre la Franja de Gaza e Israel.
Fuentes gazatíes estimaron el número total de manifestantes en decenas de miles, entre ellos mujeres y niños. Los manifestantes se concentraron en diferentes puntos a lo largo de la frontera entre este territorio palestino y el Estado hebreo, constataron periodistas de la AFP.
Unos pocos se acercaron a la valla fronteriza, protegida por militares israelíes con tanques y francotiradores, que utilizaban gases lacrimógenos y balas reales para hacer retroceder a los palestinos.
Las fuerzas de seguridad israelíes también usaron un dron para lanzar gases lacrimógenos a lo largo de la frontera, indicó un portavoz de la policía. Es una de las primeras veces que se usa un dron con este objetivo.
"17.000 palestinos participan en revueltas en cinco ubicaciones a lo largo de la valla de seguridad de la Franja de Gaza", afirmó el ejército israelí.
"Los alborotadores hacen rodar neumáticos en llamas y arrojan bombas incendiarias y piedras a la valla de seguridad y a las tropas (israelíes), que responden con material antidisturbios y disparando contra los principales instigadores", agregó.
Los dirigentes militares y políticos israelíes advirtieron que el ejército no dudaría en dar a los francotiradores la orden de abrir fuego si los palestinos intentaban entrar en territorio israelí durante las manifestaciones.
Por su parte, los palestinos, y también Turquía, acusaron a Israel de "uso desproporcionado" de la fuerza.
Protestas. Los gazatíes levantaron campamentos con carpas cerca de la valla fronteriza para denunciar el estricto bloqueo impuesto desde hace diez años por el Estado hebreo y el cierre casi permanente del paso hacia Egipto.
Este movimiento de protesta también reivindica el "derecho al retorno" de los cientos de miles de palestinos que fueron expulsados de sus tierras o huyeron de la guerra que siguió a la creación de Israel en 1948.
Desde 2008, Israel y Hamas se han enfrentado en tres guerras en el enclave palestino y desde 2014 observan un tenso alto el fuego.