Cinco personas murieron este domingo 20 de octubre en un incendio en Chile, en una bodega ubicada en Renca, durante otra jornada de protestas debido al alza de la tarifa del metro de Santiago. Además, el jefe de la Defensa Nacional designado por el presidente chileno Sebastián Piñera, general de División Javier Iturriaga, informó que nuevamente regirá esta noche el toque de queda, desde las 19 hasta las 6 de la mañana del próximo lunes.
Iturriaga pidió a los habitantes de Santiago que se vayan a sus casas para tener una noche tranquila y poder comenzar la semana "lo más tranquilo posible, para que todo vuelva a la normalidad". Durante una conferencia de prensa, apuntó contra "los vándalos que están en la calle les decimos que vamos a actuar contra ellos para evitar que las personas sigan sufriendo y puedan ser afectadas especialmente la integridad".
La capital Santiago, Valparaíso (centro) y Concepción (sur) seguían este domingo 20 bajo continuo patrullaje militar y policial, una decisión que el gobierno adoptó cuando el caos y la violencia eran totales el sábado. Las autoridades informaron que la medida se extenderá este domingo en la noche en Concepción.
En paralelo, según informó La Tercera, cinco personas murieron en un incendio en el interior de una bodega ubicada en Renca. Los cuerpos de los fallecidos fueron encontrados en distintos sectores del segundo piso de este galpón que tenía una extensión de 11.000 metros cuadrados y que contenía productos de ropa interior. La información fue confirmada segundo comandante del Cuerpo de Bomberos de Santiago, Diego Velásquez.
Las cinco víctimas se suman a otras tres que fueron registradas más temprano en un incendio que se produjo en medio del saqueo de un enorme supermercado Líder -controlado por la cadena minorista estadounidense Walmart- en el sur de Santiago, sin que se conozca todavía si esas víctimas fallecieron al verse atrapados cuando eran parte de los saqueos, o si por el contrario trataban de controlar las llamas. La intendenta de Santiago, Karla Rubilar, dijo a la prensa que dos personas quedaron calcinadas, mientras que una tercera murió más tarde en el hospital.
Las protestas comenzaron el viernes debido al alza de la tarifa del metro de Santiago, que cada día utilizan cerca de tres millones de personas, de 800 a 830 pesos. Una serie de incidentes violentos en las estaciones del subterráneo llevaron al Gobierno a decretar el estado de emergencia y a desplegar militares en las calles por vez primera desde el retorno a la democracia en Chile tras el fin de la dictadura de Augusto Pinochet, en 1990.
Cuando las manifestaciones desbordaron varios puntos de Santiago, con saqueos al comercio, enfrentamientos con la policía y militares y quemas de estaciones del metro, Piñera dio marcha atrás y suspendió el sábado el alza del boleto del metro. Este domingo se reunirá con sus ministros y autoridades de los demás poderes para discutir la situación. El mandatario también convocó a una mesa de diálogo "amplia y transversal" para acometer demandas sociales, que de momento no tienen un líder visible ni un pliego de peticiones preciso.
DR/MC