Pese a que Estados Unidos sigue siendo el país más afectado por la pandemia, con 77.744 muertes y casi 1,3 millones de casos registrados, el presidente Donald Trump insiste en ignorar las medidas de protección, pese a que el Covid-19 ya ha desembarcado con fuerza en la propia Casa Blanca.
Varios empleados de la Casa Blanca dieron positivo por el coronavirus en los últimos dos días, pero Trump continúa celebrando eventos públicos con un distanciamiento social limitado y sin requerir el uso de barbijos.
Coronavirus: Trump empieza a levantar el "lockdown"
Al menos dos docenas de republicanos de la Cámara se reunieron con Trump y otros funcionarios del gobierno en el salón comedor de la Casa Blanca el viernes por la tarde para discutir la recuperación económica del país durante la pandemia.
Ninguno de los asistentes llevaba barbijo.
"Quiero asesorar a nuestros amigos de los medios antes de que escriban historias sobre que no usamos máscaras y posiblemente no nos distanciamos socialmente adecuadamente", se defendió la representante Louie Gohmert, republicana de Texas, quien participó de la reunión.
Gohmert aseguró que no usaron mascarillas porque antes del encuentro se le realizaron test a cada uno de los participantes. “La única razón por la que usaríamos máscaras es si tratáramos de protegernos de ustedes en los medios. Y no les tenemos miedo. Por eso podemos estar aquí así", afirmó.
Una fotografía publicada hoy por NBC News confirmó que ninguno de los participantes llevaba máscaras, y que además no respetaban la distancia recomendada de casi dos metros.
Hacia el final de la reunión, la representante Debbie Lesko, republicana de Arizona, se inclinó sobre el representante Mike Johnson para pedir prestado su micrófono.
Trump recibió advertencias sobre el virus antes de la pandemia
El jefe de gabinete, Mark Meadows, defendió la decisión de la Casa Blanca de no exigir a los asistentes a las reuniones que se cubran la cara, y dijo a los periodistas que "los protocolos implementados ponen un énfasis más fuerte en asegurarse" de hacer los controles necesarios.
Meadows confirmó que todos los asistentes habían sido testeados para el virus. 'Las máscaras que usas generalmente son para evitar que otras personas se infecten'', agregó.
Sin embargo, en la misma reunión Trump puso en duda la confiabilidad de las pruebas y dijo que "todo el concepto" de las mismas "no es necesariamente grandioso".
"Las pruebas son perfectas, pero algo puede suceder", agregó Trump sin precisar a qué se refería.
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomienda usar una cubierta facial para ayudar a frenar la propagación del virus, pero muchos republicanos, incluido Trump, se han mostrado reacios a hacerlo.
Trump ha dicho a los asesores que cree que usar una máscara "enviaría un mensaje equivocado" a la sociedad, y lo haría ver "ridículo".
SF