Dos pilotos de un avión Boeing 737-800, de Ethiopian Airlines, se quedaron dormidos en pleno vuelo y ‘se pasaron de largo’ de la ciudad de destino. De acuerdo con Aviation Herald, el incidente ocurrió el 15 de agosto en el marco de un vuelo que partió desde Jartum, capital de Sudán, con destino a Etiopía. La nave, que mantenía la ruta hacia el aeropuerto de Adís Abeba, no descendió y sobrevoló la pista durante varios minutos.
La situación fue detectada por encargados del control de tráfico aéreo, quienes notaron que el avión se pasó del radar, por lo que intentaron comunicarse con los pilotos en varias ocasiones, pero no lo lograron. Según trascendió, en ese momento el avión volaba a una altura de 11.277 metros. Tras sobrevolar la pista durante varios minutos, el piloto automático se desconectó, y el sonido de la alama logró despertar a la tripulación. Es así que, control de tráfico vio cómo retomaban la ruta correcta para realizar el aterrizaje 25 minutos más tarde de lo previsto. El capitán realizó las maniobras necesarias para aterrizar en el aeropuerto de forma segura, pero, a pesar de esto, luego de varios días de investigación, ambos pilotos fueron suspendidos.
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De acuerdo a la versión del analista de aviación Alex Macheras, los pilotos experimentaron lo que se conoce como fatiga de sueño, situación que ocurrió en ocasiones anteriores. “La fatiga de los pilotos no es nada nuevo y continúa representando una de las amenazas más importantes para la seguridad aérea, a nivel internacional”, explicó Macheras.
Cabe destacar que un hecho similar ocurrió en abril de este año, cuando los pilotos de un vuelo que partió desde Nueva York con rumbo a Roma se quedaron dormidos durante más de 10 minutos, mientras sobrevolaban Francia. Este hecho generó una situación de alerta máxima por terrorismo, debido a que las autoridades pensaron que el vuelo había sido secuestrado. De hecho, el personal de la aerolínea hasta pensó en enviar jets de combate para interceptar la aeronave.
Luego de algunos minutos, la comunicación entre la torre de control y los pilotos se restableció. A pesar de esto, el capitán intentó ocultar que se quedó dormido, y se excusó al asegurar que los sistemas de comunicación dejaron de funcionar. Sin embargo, la investigación que se realizó después determinó que no existió ningún fallo en los instrumentos, y el piloto fue despedido por intentar ocultar su error.
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