Ecuador: 10 muertos, 70 detenidos y un despliegue de militares en las calles para combatir a bandas criminales
En las calles de las principales ciudades del país andino hay poco tráfico de autos, varios comercios cerrados, las clases presenciales fueron suspendidas en todos los niveles de educación y muchos empleados públicos y privados realizan trabajo remoto ante la crisis de seguridad.
Militares custodian la sede presidencial en el centro de Quito y sus alrededores |
Agencia Afp
Ecuador se encuentra inmersa en una dramática situación al sufrir una serie de ataques por bandas narco criminales que desencadenó una ola de violencia. El martes un grupo armado asaltó un canal de televisión y se multiplicaron las denuncias por secuestros.
El presidente Daniel Noboa declaró que el país andino entraba en un conflicto armado interno tras una nueva espiral de violencia, que desde el lunes dejó un saldo de 10 muertos, entre ellos dos agentes de la Policía Nacional, y más de 70 detenidos.
Aunque los disturbios se desataron días atrás con la fuga de la cárcel de Guayaquil del poderosísimo líder de la facción criminal "Los Choneros", Adolfo Macías, alias "Fito", a la que le siguió la de otro líder narco, Fabricio Colón Pico, la crisis alcanzó su punto máximo el martes pasado cuando un grupo hombres armados irrumpió en la transmisión en vivode un canal de televisión.
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Durante el asalto, obligaron a los trabajadores a arrodillarse, a dos de ellos le dispararon y enviaron al presidente distintos mensajes relacionados a la presencia policial. No hubo muertos.
Estas tomas también se expandieron a una universidad y a un shopping de Guayaquil.
Por otra parte, al menos siete policías fueron secuestrados y estallaron varios explosivos en la zona costera de Esmeraldas, en la frontera con Colombia. En tanto en la capital, Quito, explotó un coche bomba.
Las autoridades policiales dijeron que detuvieron al menos 70 personas por supuestos actos terroristas en distintos puntos del país, entre ellas los 13 hombres encapuchados que ingresaron armados por la tarde en el canal público TC Televisión en Guayaquil, considerada la ciudad más violenta del país.
Asimismo, la Policía de Ecuador informó la liberación de tres policías que habían sido secuestrados el lunes y que fueron liberados el martes.
Estado de excepción
Horas después del asalto en el canal de televisión y para hacer frente a la situación, Noboa, que asumió la presidencia hace un mes y medio tras la renuncia de Guillermo Lasso, suscribió el decreto que reconoce la existencia de un conflicto armado interno sin precedentes. El decreto ordena a las Fuerzas Armadas que ejecuten operaciones para “neutralizar” a las organizaciones ahora llamadas terroristas.
El Presidente ecuatoriano había declarado un día antes el estado de excepción, incluidas las penitenciarias, y toque de queda tras la fuga del jefe de la mayor banda narcocriminal de una cárcel de Guayaquil.
"Acabo de firmar el decreto de estado de excepción para que las Fuerzas Armadas tengan todo el respaldo político y legal en su accionar" en las calles y reclusorios, expresó el mandatario en su cuenta en Instagram.
Calles vacías y comercios cerrados
En la mañana de este miércoles, buena parte de los ciudadanos se resguardaron en sus casas para evitar eventuales actos de violencia, mientras centenares de patrullas militares custodiaban las calles de Quito y de la ciudad portuaria de Guayaquil.
En las calles de las principales ciudades se observaban con poco tráfico de autos, varios comercios cerrados, sin estudiantes debido a que las clases presenciales fueron suspendidas en todos los niveles de educación y con muchos empleados públicos y privados realizando trabajo remoto ante la crisis de seguridad.
"Hay miedo, una tiene que estar con precaución, mirando para acá, para allá, si tomo este bus, qué va a pasar", dijo a la agencia de noticias AFP una mujer de 68 años que salió a trabajar "aterrorizada" en una oficina del norte de Quito.
