INTERNACIONAL
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Indagan vínculos políticos de los colombianos acusados de matar a Fernando Villavicencio

Las autoridades ecuatorianas, con apoyo de investigadores colombianos y del FBI, avanzan en el esclarecimiento del asesinato del candidato presidencial ecuatoriano, baleado el miércoles a la salida de un acto político. El peritaje de celulares incautados a los seis acusados detenidos por el magnicidio revelaron llamadas a políticos ecuatorianos cuyos nombres no fueron divulgados. Horas después de su muerte, una candidata a la Asamblea escapó a un atentado en otra región del país. El protagonismo de los pistoleros colombianos en hechos de violencia en varios países.

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Dolor. El velatorio de Fernando Villavicencio, candidato de centro y periodista de investigación, que había revelado que un capo narco con vínculos con el cartel de Sinaloa lo había amenazado desde la cárcel. | AFP

La Fiscalía de Ecuador presentó ayer cargos contra los seis hombres detenidos por su presunta participación en el asesinato, el miércoles, de Fernando Villavicencio, candidato presidencial a las elecciones del 20 de agosto, advirtiendo que el crimen ha generado “conmoción social” y un “alto riesgo de fuga” por parte de los sospechosos, todos de nacionalidad colombiana. 

Los detenidos son Andrés Manuel Mosquera Ortiz, José Neider López Hitas, Adey Fernando García García, Camilo Andrés Romero Reyes, Jules Osmín Castaño Alzate y Jhon Gregore Rodríguez. Los seis están bajo prisión preventiva.

Según medios de Colombia, los seis hombres tienen antecedentes penales en ese país por narcotráfico, homicidio, hurto, tráfico y portación de armas y ataque contra servidor público.

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El Ministerio Público ha expuesto en una vista 22 “elementos de convicción” que avalarían el procesamiento de estas personas, entre las que figuran pruebas de la escena del crimen y de los registros realizados, así como declaraciones de los testigos del ataque que se cobró la vida de Villavicencio tras un mitin electoral en la capital ecuatoriana, Quito.

“El protocolo de autopsia indica que la víctima recibió disparos de larga distancia, mientras que el informe balístico determinó que las vainas calibre 2-23 coinciden con uno de los fusiles encontrados en los allanamientos, expone la Fiscalía en su comunicado, en el que da cuenta también de una huella dactilar hallada en una moto. La instrucción fiscal permanecerá abierta por treinta días.

Investigadores de Ecuador y Colombia, con el apoyo del FBI, avanzan en el esclarecimiento del crimen.

Las autoridades de seguridad de los tres países sostuvieron una cumbre virtual, en la que identificaron plenamente a los implicados y recabaron material probatorio entre los cuales cuentan cuatro teléfonos celulares incautados, reporte de llamadas y llamadas telefónicas con supuestos políticos de Ecuador.

Según el diario El Tiempo, los sospechosos sostuvieron llamadas telefónicas con al menos tres políticos de Ecuador, de los que aún no se conocen sus nombres.

Crimen organizado. Villavivencio, de 59 años, murió víctima de varios disparos, mientras que otras nueve personas resultaron heridas, entre ellas una aspirante a diputada y tres agentes responsables de la seguridad del candidato presidencial. Había denunciado la semana pasada amenazas contra él y su equipo de campaña de parte del detenido líder del grupo Los Choneros, con nexos con el cartel mexicano de Sinaloa.

Tras su muerte, el presidente Guillermo Lasso decretó el estado de emergencia por sesenta días y confirmó las elecciones presidenciales para el 20 de agosto, mientras varios de los candidatos suspendieron sus campañas. Lasso responsabilizó del ataque a miembros del “crimen organizado” y advirtió que “les va a caer todo el peso de la ley”.

Candidato de los movimientos Construye y Gente Buena, Villavicencio era uno de los ocho presidenciables para los comicios anticipados en Ecuador, un país que fue durante décadas un oasis de paz en Sudamérica pero que comenzó a cambiar hace unos años a raíz de vínculos con carteles mexicanos y colombianos.

La tasa anual de homicidios casi se duplicó en 2022 a 25 homicidios por cada 100 mil habitantes. Las matanzas carcelarias dejan más de 430 reclusos muertos desde 2021.

Otro ataque. El jueves, pocas horas después del asesinato de Villavicencio, la candidata a la Asamblea Nacional Estefany Puente escapó ilesa de un ataque después de que dos sujetos armados a bordo de motocicletas abrieron fuego contra el vehículo en el que se desplazaba por la ciudad de Quevedo, en la provincia de Los Ríos.

Según las informaciones preliminares, Puente conducía un vehículo en compañía de su padre y de un colaborador cercano, cuando fue interceptada por dos desconocidos, según informaciones recogidas por el diario El Universo.

En ese momento, uno de los sujetos abrió fuego contra el parabrisas y el costado derecho del automóvil y, más tarde, se dio a la fuga. La Policía de Ecuador investiga ya el suceso en aras de conocer los motivos del atentado.

Los detenidos. Dos de los seis colombianos capturados por el magnicidio del candidato presidencial Fernando Villavicencio habrían ingresado a Ecuador hace unos pocos días. La información fue brindada por fuentes colombianas que colaboran con las autoridades de Ecuador para determinar la autoría del asesinato. Cuatro de los detenidos no tenían su situación migratoria regulada. Los hombres habrían sido contratados para cometer el crimen por la banda criminal ecuatoriana Los Lobos. El grupo, sin embargo, negó su participación. Las autoridades creen que hay más involucrados en el caso. Uno de los colombianos capturados es Andrés Manuel Mosquera Ortiz, nacido en la ciudad de Cali, al suroeste de Bogotá. Estuvo preso cuatro años por el delito de fabricación y tráfico armas de fuego y municiones. El segundo hombre es Adey Fernando García, también de Cali. Ha sido detenido en el pasado por tráfico y fabricación de drogas, homicidio agravado, posesión de armas de fuego, entre otros delitos. El tercero es José Neider López Hitas, con antecedentes por hurto calificado. El cuarto señalado es Camilo Andrés Romero Reyes, procesado en Colombia por aprovecharse de los efectos de otro hecho delictivo. El quinto de los colombianos detenidos por el atentado contra Villavicencio es Jules Osmin Castaño Álzate. Acusado de violencia familiar, hurto calificado y tráfico de estupefacientes, entre otros. El sexto es Jhon Gregore Rodríguez Gongora, sin antecedentes, al menos ante la Justicia de Colombia.