A partir del lunes 18 de enero, los taxistas de San Pablo cumplen nuevas normas: entre ellas, no podrán hablar de fútbol, ni usar bermudas ni sandalias. La alcaldía de la mayor ciudad de Sudamérica, le exige cumplir un código de vestuario y conducta para no ser sancionados. La medida se implementó, mediante un decreto, promulgado a finales diciembre.
En su lucha por trata de regular las aplicaciones de taxis en el celular y la competencia de Uber, la autoridad sancionará con 35,52 reales (unos 9 dólares) a los conductores que, entre otras normas, no lleven el cabello y la barba bien arreglados o las uñas limpias.
La medida, implementada por decreto y promulgado a finales de diciembre, establece que la indumentaria de los taxistas debe estar compuesta por camisa, jean oscuro o pantalón de vestir, cinturón, zapatos y un blazer, para los días de frío. Los conductores de autos de lujo En el caso deberán llevar smoking o traje con corbata.
A la vez y según el decreto, los conductores de taxis deberán "evitar polémicas" que tengan que ver con el fútbol, política o religión, además de recibir al pasajero con "optimismo y alegría" y no decir malas palabras. También, los taxistas serán multados si discriminan a algún pasajero, si no llevan cargadores de celular o si no ofrecen medios de pago electrónico.
Por su parte, las aplicaciones móviles tendrán que ofrecer, desde comienzos de marzo, un espacio para que el pasajero pueda valorar la calidad del servicio. A partir de estos controles, los fiscalizadores del departamento de Transportes de esta ciudad, podrán convocarlos ante la comisión de disciplina. Si la situación es grave se enviada a acciones legales.
Como sucede en otras ciudades del mundo, los taxistas de Sao Paulo se oponen a la implementación de la estadounidense Uber. De esta manera, llevan meses protestando contra los proyectos de la alcaldía para regular los nuevos servicios de transporte que se contratan a través de aplicaciones.
