El ministro de Justicia y Seguridad Pública de Brasil, Sergio Moro, afirmó este miércoles que no solo no hubo "colusión" con la Fiscalía en el caso 'Lava Jato', que terminó con la condena del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, sino que tuvieron "divergencias".
Lo dijo diez días después de que el portal de noticias The Intercept Brazil publicara una serie de conversaciones que Moro, como juez del caso, habría tenido con fiscales e investigadores a través de distintas plataformas de mensajería instantánea.
Estos contactos entre los actores de un caso en curso podrían suponer una violación del Código de la Magistratura, por lo que Moro se presentó voluntariamente este miércoles ante la Comisión de Justicia del Senado para explicarse, según informa la Agencia Brasil.
"No hubo colusión, sino divergencias", dijo. Recordó que, de las 45 denuncias presentadas por el Ministerio Público Federal (MPF) en Lava Jato, todas recibieron sentencia -291 acusados, 211 condenados y 63 absoluciones- y 44 fueron recurridas por el propio MPF.
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"Creo que no ha habido un juez con tantos recursos interpuestos como yo", dijo Moro, agregando que prácticamente todas las decisiones que tomó en el marco de Lava Jato fueron apeladas ante los máximos tribunales de Brasil porque afectaban a "personas poderosas".
Aseguró además que "los que fueron condenados lo fueron en base a las pruebas de que cometieron corrupción, gran corrupción", a pesar de que, según contó, sufrió "ataques cotidianos por parte de quienes no querían cambios en el patrón de lucha contra la impunidad".
Moro atribuyó la filtración de estas conversaciones, que dice que no puede verificar porque se produjeron hace años, a "operaciones de contrainteligencia" y se mostró dispuesto a colaborar con las investigación sobre su gestión del caso Lava Jato: "No tengo nada que esconder".
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"Están haciendo esto para socavar la campaña anticorrupción, que no fue un logro para mí ni para los fiscales, sino para la sociedad brasileña. No tengo nada que ocultar", agregó.
Moro aprovechó su presentación para defender su decisión de adoptar la invitación del presidente, Jair Bolsonaro, a formar parte de su Gobierno como ministro de Justicia y Seguridad Pública. En su opinión, es "una oportunidad para consolidar los avances en la lucha contra la corrupción".
Moro insistió en que no renunciará, mientras el presidente Bolsonaro afirmó que "no existe posibilidad alguna" de que saque a Moro del cargo.
D.S.
