MODO FONTEVECCHIA
MATERNIDAD ASISTIDA

Gastón Rey Valzacchi: "El congelamiento de óvulos en Argentina creció más del 100% en el último año”

El director médico en Procrearte analizó el fenómeno después de las declaraciones de la actriz Jennifer Aniston sobre su lucha para ser madre.

Gastón Rey Valzacchi: "No va a existir nunca una ley que cubra el congelamiento de óvulos"
Gastón Rey Valzacchi: "No va a existir nunca una ley que cubra el congelamiento de óvulos" | CEDOC

El especialista en medicina reproductiva, Gastón Rey Valzacchi, reconoció que "hoy la mujer pospone su maternidad" y que "es muy común que los problemas de fertilidad sean más por una cuestión de tiempo". A su vez, resaltó en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9) que "no va a existir nunca una ley que cubra el congelamiento de óvulos".

Nuria Am (NA): Tomando como disparador las declaraciones de Jennifer Aniston sobre la maternidad, ¿ha ido creciendo la cantidad de mujeres que deciden congelar sus óvulos? ¿A qué edad ocurre en promedio?

La nota que mencionás de Jennifer Aniston tiene varias aristas y una es esa, el tema del congelamiento de óvulos. La clave es que hoy la mujer pospone su maternidad por cuestiones sociales, laborales o económicas. Y también es cierto que, el ovario, que es el que produce los óvulos, va disminuyendo su funcionalidad con el correr del tiempo.

Por eso se dan estas dos incongruencias: el posponer la maternidad y lo biológico, que hace que el ovario vaya perdiendo su funcionalidad. Entonces, es muy común que los problemas de fertilidad sean más por una cuestión de tiempo y las chances de embarazo son menores.

Ella comenta que, si alguien le hubiese dicho que podía congelar óvulos, hubiese sido otra situación. Y es una realidad, es decir, congelar óvulos requiere ponerlos a temperaturas muy bajas para que las células dejen de envejecer. Con esas técnicas, se pueden tomar óvulos, cuando están en su mejor momento funcional, y guardarlos para ser utilizados.

Jennifer Aniston habló sobre su lucha por ser madre: “intenté todo”

NA: ¿Creció en Argentina la cantidad de mujeres que deciden congelar óvulos? ¿Y a qué edades?

Sí, creció muchísimo después de la pandemia. Creemos que fue porque el tema se instaló, la gente lo conoce, y empezó a difundirse. Por ejemplo, en nuestro centro, el congelamiento de óvulos para preservación de fertilidad creció más del 100% en el último año.

Y el otro tema crítico es la edad, porque si bien el momento reproductivo promedio está por arriba de los 35 años, el mejor momento funcional del ovario es entre los 25 y los 30 años. Por eso lo ideal sería realizar el proceso antes de los 35 años, porque uno sabe que después hay menos cantidad de óvulos y con menor funcionalidad.

También es cierto que las mujeres concurren a preservar sus óvulos a partir de los 35 años porque ven que se les acaba el tiempo biológico, quizás no están en pareja, tienen proyectos, y si consultan desde los 40 años, las expectativas de que esos óvulos tengan buenos resultados son bastante pobres. El mensaje es que existe esa posibilidad, es una buena alternativa, pero también es importante remarcar el momento de hacerlo.

Primeriza a los 40: parió en pandemia y decidió crear una multiplataforma para acompañar a embarazadas de riesgo

NA: ¿Qué perfil tienen las mujeres que acuden a esta alternativa?

La mayoría de las mujeres que consultan no tienen pareja y pasaron los 35 años. También tienen un desarrollo profesional y ven que, en el corto plazo, no van a buscar el embarazo.

Lo cierto es que la mujer que está en pareja piensa que, si no es en el momento, podrá buscar el embarazo más adelante. Pero la que no tiene una pareja constituida, empieza a ver una situación más compleja.

Alejandro Gomel (AG): ¿Cuántos años pueden estar conservados estos óvulos? ¿Qué pasa, desde lo legal, si no se utilizan?

En cuanto a los años, pueden estar el tiempo que uno quiera. Cuando uno congela los óvulos, las células dejan de tener el metabolismo, y no envejecen. Entonces, conceptualmente, es lo mismo que estén un día o 10 años.

Con respecto a la parte legal, el óvulo es una célula, como pasa con los espermatozoides. Por lo tanto, no hay ningún conflicto legal. Si no se quieren usar, se pueden descartar.

Valentina Bassi: “hay una romantización de la maternidad"

AG: En el caso del fallecimiento de una mujer, ¿qué se hace con esos óvulos?

Nunca estuve en esa situación, pero uno mantiene el congelamiento en la medida que la mujer mantiene el deseo de hacerlo, porque se hace un mantenimiento anual del proceso. Eventualmente, quedarán ahí. Si viene alguien en representación legal de la persona, se podrá descartar.

NA: En cualquier caso, no van a un banco en común. ¿Hay algún conflicto ético?

No, esto no es una donación de óvulos, es otra área. Se trata de óvulos propios, para uso personal. Tampoco hay un problema ético porque no están fecundados. Ni se da un inconveniente legal.

NA: ¿Sigue siendo caro eso en Argentina?

Nuestro país tiene una Ley de reproducción médica asistida, que es muy buena porque tiene cobertura al 100% de la reproducción, incluyendo en algunos casos la de los óvulos, para aquellas pacientes que tengan riesgo de dañarlos, como pasa con quienes llevan adelante un tratamiento oncológico.

La única práctica que no está cubierta es esta porque es de preservación social, es decir, que depende del deseo de una persona para querer hacerlo.

Madres de la pospandemia: la mujer ‘multitarea’ y el riesgo del estrés crónico

En cuanto al costo, depende de la capacidad económica de cada uno. Creo que no va a existir nunca una ley que cubra el congelamiento de óvulos. Sí lo hace cuando hay una razón médica. Y el mantenimiento anual es de 200 dólares.

NA: ¿Es doloroso el proceso de extracción de los óvulos?

No es doloroso porque se hace con una sedación. Para poder hacer esto hay que estimular la ovulación de la mujer, a través de la medicación. Eso se controla con ecografías para ver cómo van creciendo y, en un determinado momento, se aspiran.

Como es un procedimiento invasivo, se hace con sedación, durante 10 o 15 minutos. Luego queda en observación, por las dudas, y ya se la da el alta. Pero al día siguiente puede estar haciendo su vida habitual. Es un buen disparador para seguir generando conciencia y transmitir que existe la posibilidad de preservar la fertilidad.

JL PAR