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Medioambiente y activismo

¿Quién es Francia Márquez y por qué ganó el “Nobel verde”?

La compañera de fórmula de Gustavo Petro luchó contra la minería legal e ilegal en Colombia. Herencia esclavista y marcha hacia Bogotá.

Francia Márquez
Francia Márquez | Reuters

La principal candidata a vicepresidenta de Colombia es mujer, negra y ambientalista. Hace cuatro años, Francia Márquez ganó el Premio Goldman, llamado el "Nobel verde”, por su lucha contra la minería que estaba destruyendo a la comunidad negra de La Toma, en su tierra natal del Cauca. El logro le llevaría nuevas alegrías y algunos pesares.

A principios de la década pasada, cuando el gobierno entregó títulos de explotación minera a grandes empresas transnacionales, La Toma se puso de pie. Las protestas escalaron a tal punto que el pueblo fue declarado “perturbador de mala fe”, delito que podía conllevar un desplazamiento forzoso para la comunidad. Márquez empezó a estudiar Derecho, y junto a diversas organizaciones negras activó una batalla judicial que terminó con un fallo que suspendió las concesiones.

Pero el conflicto se intensificó años más tarde, cuando decenas de retroexcavadoras llegaron a esa comunidad para gestionar extracciones ilegales, que generaron contaminaciones con mercurio. Márquez volvió a alzar la voz. “El agua que consumimos está envenenada y no tenemos forma de tratarla”, denunció ante la BBC. “Somos descendientes de esclavos africanos. Vivimos de la minería artesanal y la agricultura”.

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La Marcha de los Turbantes

Entonces decidieron llevar el reclamo hasta la capital, Bogotá. La “Marcha de los Turbantes” demandó 10 días y 350 kilómetros a través de las montañas. Al principio eran 15 personas, pero cuando llegaron, sumaban 130. Protestaron durante 22 días y tomaron el Ministerio del Interior, lindero al Palacio Presidencial. La táctica obligó al gobierno a sentarse a negociar. Las operaciones ilegales cesaron, y a fines de 2016 las fuerzas de seguridad eliminaron toda la maquinaria de La Toma.

Pero la lucha tuvo su precio. Las amenazas de los paramilitares, que acusaron a Márquez de oponerse al desarrollo, obligaron a ella y a su familia a dejar su tierra ancestral. En Cali completó sus estudios y empezó a proyectar sus próximos pasos. Hoy está decidida a emprender otra revolución desde el Palacio Presidencial.

CB PAR