Que la izquierda haya quedado a un ápice de acceder por primera vez en la historia a la Casa de Nariño no significa que la tenga fácil el candidato Gustavo Petro. No tiene enfrente a un candidato de la politiquería, como llaman en Colombia a la casta de los partidos tradicionales, sino a Rodolfo Hernández, un empresario excéntrico que, desde la derecha, aboga como él por el voto contra el sistema.
En la segunda vuelta del 19 de junio, el senador ex M-19, Petro, querrá revalidar el 40,3% de los sufragios que obtuvo el domingo, mientras que el ingeniero Rodolfo Hernández, ex alcalde de Bucaramanga, procurará dar vuelta el resultado con un caudal considerable del 28,5%.
"Elecciones en Colombia: triunfó Gustavo Petro pero irá a balotaje con Rodolfo Hernández"
Ambos, con discursos diametralmente opuestos, derrotaron a las élites conservadoras y liberales que gobernaron durante dos siglos el país y buscarán capitalizar el descontento de los colombianos con la clase dominante. El descontento desató protestas masivas desde 2019 que se extendieron durante dos años a pesar de la pandemia.
Los partidos tradicionales recibieron una bofetada por no estar a la altura de las circunstancias. En especial, el presidente Iván Duque, con más de un 70% de imagen negativa.
Los conservadores del expresidente Álvaro Uribe quedaron por primera vez fuera de juego en 20 años por sus enredos judiciales, así como los liberales de César Gaviria, renuentes a un sellar un pacto con Petro. Petro, de 62 años, necesita dos millones de votos más. Muchos frente a un magnate, “el Trump tropical”, que se ha convertido en una estrella de una red para adolescentes, TikTok, a sus 77 años.
A los ojos de los colombianos, el outsider no es Petro, sino Hernández con un discurso antifeminista y antiinmigrante con respecto a los venezolanos. Un rival incómodo para Petro. Al punto de estar igualados en un 47% de los votos para la decisiva segunda vuelta.
CB PAR