Desde ayer, Boris Johnson gobierna a plazo fijo. Lo sucederá el 5 de septiembre el nuevo líder del Partido Conservador británico que, a su vez, será investido primer ministro. La fecha surgió de un cambio de reglas del Comité 1922, máxima autoridad partidaria, para evitar que Johnson se quede en Downing Street hasta octubre, como tenía previsto, después de haber dimitido la semana pasada al liderazgo de los tories.
La permanencia de Johnson inquieta a los diputados conservadores. No se sienten representados por él, después de haberle demostrado falta de confianza. El nuevo calendario apresuró las candidaturas. Las inscripciones cierran hoy. La primera votación para la elección del nuevo líder será mañana, miércoles. La segunda, el jueves.
Cada candidato necesita un mínimo de 20 respaldos de diputados conservadores. En la siguiente votación debe conseguir al menos 30 votos para pasar a la otra ronda. Hasta ahora, 11 parlamentarios anunciaron su intención de reemplazar a Johnson. Sólo el billonario de origen indio Rishi Sunak, ex ministro de Finanzas, y Penny Mordaunt, ex secretaria de Defensa, alcanzaron el umbral de las 20 nominaciones. Sunak superó las 30 para pasar a la ronda de votación. Muchos de los 358 diputados conservadores aún no han revelado a quién apoyarán.
En 2019, cuando ganó Johnson, eran necesarios ocho votos para pasar a la primera vuelta. Hubo 10 candidatos, sometidos a seis rondas de votación hasta que quedaron los dos finalistas.
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El cambio de las reglas del Comité 1922, presidido por sir Graham Brady, diputado desde 1997, tuvo un solo fin: acortar el mandato de Johnson, que podía quedarse hasta octubre como primer ministro, cuando se celebre el congreso partidario, y no ser sometido a otro voto de confianza de los suyos por un año.
El aumento del número de diputados necesario para elegir al nuevo líder apresura los tiempos y evita que Johnson recorte impuestos, entregue subsidios o elimine el protocolo de Irlanda del Norte, que regula el Brexit y la frontera entre Gran Bretaña y Europa. Todo sea por evitar que deje un legado a su medida que comprometa a su inminente sucesor.
JL PAR