"A mi abuela la mataron a sangre fría": el dolor de la nieta de la mujer asesinada para robarle el auto
Leonor Morales recibió un balazo por la espalda de ladrones que la asaltaron cuando esperaba que su hija y su nieta cerraran el negocio que tienen en González Catán. La Policía detuvo a tres menores vinculados con el hecho. Uno tiene 17 años y antecedentes similares por un crimen en ocasión de robo hace dos años. Los otros dos menores (15 y 17) cayeron cuando quisieron vender el auto robado por redes sociales. La desolación de la familia Morales en diálogo con PERFIL.
La mujer fue asesinada en la puerta del negocio de su hija. |
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Eran un poco más de las 20 del jueves pasado. Leonor Isabel Morales había terminado de festejar el cumpleaños de su bisnieto y había ido con una de sus nietas a buscar a su hija al negocio que tenían en el partido bonaerense de González Catán. Pero, mientras esperaba, fue sorprendida por dos delincuentes que le robaron el auto cuando las otras mujeres bajaban la persiana del local. Le dieron un tiro y se llevaron el vehículo. “A mi abuela la mataron a sangre fría”, relató Ayelén. Hay tres menores detenidos.
“Dejaron a una familia destrozada. Por cómo la mataron, no le dieron tiempo a nada. La mataron a sangre fría, desde la ventanilla le dispararon, no le dieron tiempo a nada, ni siquiera a sorprenderse”, contó a PERFIL Ayelén Rabina, una de las nietas de la víctima
En ese sentido destaca: “Estamos indignados por saber que no es la primera causa que tiene y que tendría que haber estado detenido (el menor acusado). Salió hace dos semanas y ya mató a otra persona, es lamentable cómo se manejan estos malvivientes en donde tu vida no vale nada. Como familia sentimos que nos arrebataron a nuestra abuela de una manera brutal y sin piedad, actuando con mucha impunidad”, se lamenta Ayelén en diálogo con este diario y hermana de la joven que presenció el lamentable hecho.
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El auto robado fue el hilo conductor a los adolescentes detenidos ayer por estar vinculados con el hecho, según los investigadores.
Fue uno de los 13 nietos de Leonor quien se topó con una publicación del Volkswagen Gol Trend gris de su abuela ofertado por los presuntos delincuentes. Pactó la compra del vehículo y dio aviso a la Policía.
La imagen de la persona que ofertaba el auto coincidía, según los investigadores, con una de las personas que quedaron registradas en el momento del hecho en las cámaras de seguridad.
Con la autorización del fiscal del caso Carlos Arribas, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática de Homicidios de La Matanza, se dio luz verde al encuentro. Allí se detuvo a dos menores de 15 y 17 años y se secuestró el auto en las calles Alagon y Azul, en González Catán, detalló la agencia de noticias Telám.
El presunto tercer implicado y, vinculado directamente con el crimen, cayó por un vivo de Instagram. Los efectivos policiales fueron a apresarlo en los domicilios que figuraban relacionados con él, pero no lo encontraron.
Allí fue donde reconocieron el lugar desde el que realizó la transmisión en vivo y lo apresaron. Secuestraron un arma que coincide con el calibre del proyectil que le extrajeron a la víctima tras la autopsia.
Según los investigadores, cuenta con un antecedente por otro homicidio ocurrido en 2021, cuando tenía 15 años. Hace una semana había recuperado la libertad, se informó (ver aparte).
El fiscal que quedó ahora a cargo de la causa (porque los presuntos implicados son menores de edad) es Pablo Insúa, de la UFI 2 del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil de La Matanza. Y los imputó por la figura de “robo agravado por el uso de arma de fuego y homicidio criminis causa”, es decir, matar para ocultar otro delito y lograr la impunidad. No se descarta aún que alguno de los otros dos esté implicado en el crimen y el robo del auto.
“Fueron segundos, mi hermana y mamá bajaban la persiana del local y en el bullicio del ruido de la persiana y la puerta de escape nunca escucharon el tiro, pero sí oyeron el auto salir arando”, detalló Ayelén, y continuó: “Ahí salieron inmediatamente para ver qué había ocurrido y se encontraron con mi abuela tirada en el piso boca abajo”.
La autopsia determinó que Leonor recibió un balazo que le ingresó por la espalda. El plomo que la mató era calibre .22, igual que el que dispara el arma secuestrada en la casa vinculada con el menor acusado.
El ataque ocurrió en la calle Manuel Arias al 3700, en la localidad de González Catán. Hasta allí fue la víctima para pasar a buscar a su hija que cerraba la granja Mateo.
Leonor y su familia terminaban de festejar el cumpleaños de su bisnieto en un salón infantil de la zona. Pero todo culminó empañado con el desenlace más doloroso.
Cuando Ayelén culminó de llevar los regalos de su hijo a su casa recibió la noticia. “Ahora solo nos queda pedir justicia”, aseguró la chica.
Perfil. Leonor era madre de tres hijos. Tenía 13 nietos y cinco bisnietos. Era el pilar de su familia. Generosa, comprometida y luchadora, así la discribió Ayelén.
“Mi abuela era una mujer llena de vida, que tenía más ganas de vivir que cualquiera de nosotros. Luchadora, trabajadora, bondadosa, generosa y superservicial, siempre predispuesta a ayudar. Estos días vino mucha gente, y todos decían lo mismo y contaban cosas de cuando los ayudaba, o cuando algún vecino no tenía para comer y ella donaba comida de la pollería. Una persona superbondadosa no merecía este final”, recuerda Ayelén.
La joven destacó que su abuela era para ellos “un pilar fundamental en nuestras vidas”, y sostuvo: “Somos una familia muy unida, siempre compartiendo muchos momentos; se va a sentir mucho su ausencia”.
