La Cámara Nacional de Casación Penal dejó firme este jueves el procesamiento del policía Luis Chocobar por el delito a "homicidio agravado por uso de arma de fuego en exceso en el cumplimiento de un deber", por dar muerte de un joven de 18 años que escapaba tras apuñalar durante un asalto a un turista estadounidense en el barrio de La Boca en diciembre.
La sala de Feria del Tribunal, integrada por María Laura Garrigós de Rébori, Daniel Morin y Héctor Magariños, declaró inadmisible el recurso presentado por la defensa de Chocobar que había confirmado el fallo, según consignó la agencia Noticias Argentinas.
El16 de febrero, la Cámara del Crimen confirmó el procesamiento del agente, pero cambió la calificación al entender que hubo un exceso en el cumplimiento del deber y no en la legítima defensa. Los jueces del tribunal dispusieron esta modificación, por lo que el efectivo quedó imputado por homicidio agravado por la utilización de un arma de fuego en exceso en el cumplimiento de un deber.
Según los magistrados, Chocobar actuó correctamente en el inicio de los hechos, pero pusieron sobre la lupa el desenlace de la persecución, que deberá ser discutida en un juicio oral y público. "Lo hizo inicialmente ajustando su comportamiento a la normativa que regula la función policial, pero concluyó en un acto excesivo que merece ser juzgado en una etapa posterior", sostuvieron.
Momento en el que Chocobar le disparaba al ladrón
En tanto, en su fallo agregaron: "Actuar como policía implica también de manera imperiosa reconocer los límites que la propia institución establece para que sea correcta, mediante el dictado de reglamentos y entrenamiento profesional y permanente que, aun puesto en duda en su dimensión real, debió bastar para internalizar la norma".
Tras el hecho, el policía fue recibido por el presidente Mauricio Macri y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Luego de las controversias, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, sostuvo: "No creemos en el gatillo fácil, no creemos que las señales de respaldo a las fuerzas policiales equivalga a promover que no se cumpla con la ley".
La palabra de Chocobar. Semanas atrás, Chocobar concedió una entrevista al diario Clarín y allí manifestó: "Muchas veces no puedo dormir, pero no me arrepiento de lo que hice". Asimismo, remarcó que que hizo "lo correcto", de lo contrario "hoy en día no tendría el apoyo" de sus superiores. "Ahora me encuentro sin casa, pendiendo de un hilo de seguir trabajando o no", reveló.
"El tema es que yo no lo maté. Cuando voy al lugar, él estaba herido pero estaba consciente. Él muere varios días después. Si yo lo hubiera matado, le doy en el pecho, en la cabeza... te saco la vida. Yo no, de la cintura para abajo. Era que deponga su actitud, que no siga siendo violento. Si pasaba alguien lo agarraba y para cubrirse él lo tomaba de rehén y después íbamos a seguir hablando sobre esto porque no sabíamos qué iba a pasar. Traté de que no siga con lo que estaba haciendo. Supuestamente llega la ambulancia tarde", recordó el efectivo acerca del día del hecho.
El caso. El 8 de diciembre, un turista norteamericano identificado como Frank Joseph Wolek, de 60 años, resultó herido de gravedad al ser apuñalado por dos delincuentes que intentaron robarle sus pertenencias en el barrio porteño de La Boca, más precisamente en la intersección de Garibaldi y Olavarría, a pocos metros del paseo turístico Caminito.
En ese momento el efectivo de la Policía Bonaerense, Luis Chocobar, salió a perseguirlos y tras realizar algunos disparos logró detener a uno de ellos, el cual cayó herido al piso en el cruce de las calles Suárez e Irala, mientras que el cómplice logró escaparse. Los ladrones no llegaron a concretar el hurto, ya que la cámara de fotos y otras pertenencias del extranjero quedaron en el lugar durante varias horas, antes de ser retiradas por las fuerzas de seguridad.