Al menos siete personas fueron acusadas de formar parte de una organización que realizaba instalaciones clandestinas de servicios de internet y televisión por cable en distintos barrios porteños.
La investigación comenzó a partir de una serie de denuncias que recibió la empresa Telecom-Cablevisión por la existencia de irregularidades en las conexiones de internet y telefonía de vecinos que habían solicitado el servicio por medio de Mercado Libre.
A raíz de ello, la Sección Investigaciones Especiales del Departamento Investigación Informática de la Policía de la Ciudad realizó distintas tareas de campo y localizó diferentes domicilios de clientes, gracias a los comprobantes y listados que fueron entregados por Mercado Libre.
El juez Diego Slupski, a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 19, recibió la información de los efectivos y dictó las órdenes para los allanamientos, un total de diez en distintos domicilios de la Ciudad, las provincias de Buenos Aires y Santa Fe.
En uno de los lugares inspeccionados, en la avenida Eva Perón al 6300, en el barrio de Mataderos, los investigadores encontraron doscientos conectores RG10, 169 pines de salida, siete atenuadores de línea, routers e interruptores, entre otras cosas.
De acuerdo a la investigación, uno de los imputados montó allí una red de distribución clandestina y les cobraba a cincuenta vecinos para suministrar el servicio, tanto de internet como de TV.
Además, en Alberti al 1600, en San Cristóbal, se halló un decodificador adulterado. Según las fuentes, las diligencias continuaron en la provincia de Buenos Aires, en San Isidro y Pergamino, y en la provincia de Santa Fe, en Rosario y Esperanza. Se secuestraron un cable de conexión, siete notebooks, 29 módems adulterados, tres routers, cuatro decodificadores, ocho discos rígidos, 65 metros de cable coaxil y siete celulares.