Sin armas ni cascos, dos motochorros le robaron un maletín con 40 mil pesos a un hombre que minutos antes había salido de una sucursal bancaria de Lanús. La secuencia fue registrada por la cámara de seguridad de un colectivo, y enseguida se viralizó por las redes sociales.
El robo dura unos pocos segundos. En las imágenes se puede ver cómo los motochorros siguen al auto y cuando el acompañante baja y corre en dirección a su víctima. Con una piedra y guantes para no dejar huellas, el ladrón destroza el vidrio lateral derecho del coche, mientras el conductor abre la puerta con intención de bajarse.
El golpe ocurre a plena luz del día, y a metros de la esquina de Madariaga y Bustamante. Con el maletín que contenía los 40 mil pesos, el delincuente vuelve a subirse a la moto. Pero a las pocas cuadras, y cuando imaginaban que el plan había sido un éxito, un móvil de la Policía local inicia una persecución.
Según las fuentes consultadas por PERFIL, le dan la señal de alto pero los motochorros aceleran e intentan escapar a toda velocidad.
En el cruce de las calles Salta y Bureles son interceptados. "Perdí, llevate el bolso", le dice uno de los autores a un policía, con la intención de evitar su detención.
De acuerdo a los voceros, los motochorros fueron detenidos e identificados como Lucas Damián Martiniano García, de 35 años, y Manuel Feliciano Rondan, de la misma edad.
Martiniano García sería el que que se baja de la moto y se apodera del maletín. Su prontuario tiene más de 15 años, con imputaciones por robos en sus distintas versiones.
Fuentes policiales consultadas por PERFIL indicaron que seis meses después de cumplir 18 años fue detenido por primera vez en una causa por robo simple, que se tramitó en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°8 de Lomas de Zamora.
En abril del año siguiente lo imputan por otro robo. En marzo de 2006 lo demoran por un asalto a mano armada, en una causa que recayó en la UFI 6 de Lomas de Zamora.
Como rápidamente recuperó su libertad, en agosto de 2007 es identificado en un expediente por violación de domicilio. Tres años más tarde lo acusan por otro delito: "robo agravado en poblado y en banda, con empleo de arma y tenencia ilegal de arma de guerra".
Martiniano García pasó varios años en la cárcel. Pero apenas recuperó su libertad volvió a delinquir. Rondán, su nuevo compañero de causa, tiene un solo antecedente que se remota a enero de 2001, en plena crisis. El 15 de ese mes lo detienen por robo calificado.