En la búsqueda creativa y contra reloj, el Gobierno busca frenar las medidas cautelares que presentaron distintas empresas para acceder a dólares para importaciones, con un trabajo conjunto de la AFIP y de la Aduana que busca preservar al máximo las reservas. La estrategia se da en un contexto de alta volatilidad de la moneda extranjera lo que aumenta las tensiones en el área económica.
Ambos organismos tienen ahora dos cartas importantes para ayudar al Ministro de Economía, Sergio Massa.
La Aduana liderada por Guillermo Michel sigue el minuto a minuto de los pedidos empresariales y jugó un papel fuerte con las preventivas.
Otro de los instrumentos que tiene la AFIP es acelerar los detalles del acuerdo fiscal sobre los contribuyentes argentinos en el exterior. A esto se juega el Gobierno, y buscan dar el anuncio estelar antes del cierre de este año.
Esto último es relevante y el Ejecutivo trabaja duro para dar el paso positivo. Si bien todo se guarda bajo llave todos confían en obtener resultados positivos.
Hay sólo dos juzgados en los que están recayendo la mayoría de los pedidos de cautelares de empresas para hacerse de divisas.
Por esos amparos concedidos ya se fueron 2600 millones de dólares en autorizaciones de importaciones. El elemento más fuerte que habría en el relevamiento de esas cautelares es que 7 de cada 10 dólares que salieron por esa vía fueron para poder contar con productos terminados.
Claramente, la meta pasa por poder traer los dólares de los argentinos en el extranjero, por eso era necesario un cambio radical en la forma de cumplir con el objetivo fiscal.
Desde el sector empresarial varios destacan el esfuerzo y la dedicación que está llevando a cabo el director, Guillermo Michel.
Consultado sobre las cautelares, el Director de Aduana le dijo a PERFIL: “El ordenamiento fiscal que planteó el ministro de Economía también incluyó un trabajo de la Aduana sobre las cautelares. Cuando asumimos existía un stock de 2600 millones de dólares de cautelares que debían ser liberados, con dólares del Banco Central concentrados en 1068 importadores”.
“El trabajo que hicimos implicó que las 5 principales cautelares hayan sido desistidas voluntariamente por los importadores por un monto aproximado de 300 millones de dólares”, agregó.
Michel también remarcó el cambio a tiempo para poder cumplir con los objetivos impuestos, un trabajo minucioso que de a poco da sus frutos.
Por último agregó: “Acá claramente lo que marcamos fue un cambio de estrategia y aplicamos un mayor rigor profesional y técnico al trabajo de las cautelares desde el área de jurídicos de la Aduana”.
