El juicio por el caso de la valija que ingresó a la Argentina con 800 mil dólares en agosto de
2007, presuntamente para financiar la campaña electoral de Cristina Fernández de Kirchner,
comenzará hoy la tercera semana de audiencias en Miami.
El venezolano Guido Antonini Wilson declarará una vez que finalice el testimonio de Moisés
Maiónica. Este testigo reveló los
vínculos del valijero con la Dirección de Inteligencia de Venezuela con el fin de
ocultar el origen y el destino del dinero que llegó ilegalmente a Ezeiza, informó
el diario
La Nación.
Mientras tanto, más al sur, el presidente venezolano Hugo Chávez aprovechó para fustigar a su
compatriota y pedir su extradición:
“¿Por qué el gobierno de Estados Unidos no extradita al bandido que es este
empresario venezolano - norteamericano, protegido por ellos y acusado por lavado de dinero en
Argentina y que acá también tiene una causa y orden de captura por Interpol?"
"¿Por qué lo protegen y no lo envían donde cometió el supuesto delito, pues lo tienen allá
chantajeando a todos?”, se preguntó, en
declaraciones al diario
El Tiempo de Venezuela
, a la vez que calificó al juicio como “una patraña, un montaje y una operación
basura”.
“Al bandido de Antonini, ojalá me lo trajeran para acá para que me diga en mi cara de
quién eran esos dólares (...) aquí hay una orden de captura en su contra. Antonini, no sé
si algún día regresarás a Venezuela (...) o estarás condenado a quedarte allá todos los días
lamiéndoles las patas a los yanquis, traidor”, proclamó el mandatario
venezolano.
Chávez denunció que el caso fue "cronométricamente planificado": "llegando yo a Buenos Aires
ocurre el hecho, al día siguiente Antonini estaba en Estados Unidos, y allí lo protegió el FBI. A
los dos días salió que Antonini había almorzado conmigo".
Es la misma
teoría
conspirativa que sostuvieron varios funcionarios kirchneristas en Argentina: el ministro del
Interior Florencio Randazzo, por ejemplo, afirmó que todo el caso "fue una operación armada por el
FBI", calificó a los testigos de "delincuentes", y reclamó que la
justicia
local trate el tema.
El jefe de Gabinete Sergio Massa, por su parte, aseguró que
los 800 mil dólares "todavía están en Ezeiza", por lo cual "es improbable pensar
que era para financiar una campaña". Massa recordó que Chávez llegó a Argentina al día siguiente:
"si hubieran querido traer dinero, hubieran podido traerlo sin ningún tipo de problemas", afirmó.
Otro que se sumó a la teoría oficial es el ministro de Planificación Federal
Julio De Vido, quien
negó
"terminantemente" cualquier vinculación con Antonini Wilson. Por su parte, El ministro
de Justicia Aníbal Fernández
atacó al
sistema judicial estadounidense y aseguró que el FBI obligó al valijero a firmar una carta con
sus declaraciones.
Los ataques del oficialismo causaron malestar en Estados Unidos. El embajador norteamericano
en nuestro país, Earl Wayne, confirmó al diario
Clarín que hay "tensión" en la relación bilateral. El diplomático Tom Shannon dijo al
diario
La Nación que
"valoramos mucho la relación bilateral", pero defendió la "independencia judicial"
de su país.