A su ritmo vertiginoso como jefe de Gabinete, Jorge Capitanich incorpora a su agenda la campaña en Chaco. Su candidatura a intendente de Resistencia sigue en pie, según confían sus colaboradores, y por eso viaja cada veinte días a la provincia para inaugurar obras y hacer anuncios. Este año, Coqui cuenta con un presupuesto de 15 mil millones de pesos para obras para su provincia. “Es imbatible”, se entusiasman en su entorno. El objetivo de su candidatura a intendente es arrebatarle a la actual jefa comunal y candidata a gobernadora, Ayda Ayala (UCR), el principal bastión de Chaco y traccionar votos para el postulante a gobernador del peronismo que todo indica será Domingo Peppo, titular del Instituto de la Vivienda. No quiere perder su provincia.
Esta semana, Coqui quedó en off side al romper dos notas de Clarín en plena conferencia de prensa, alegando que eran noticias falsas. Luego se comprobó que la información que había volcado el diario era verdadera. Fuentes oficiales confirmaron a PERFIL que el “acting” de Capitanich había sido coordinado con las más altas autoridades de la Casa Rosada.
Ayer se enfrentó a los fiscales que organizaron la marcha del silencio en homenaje al fiscal Alberto Nisman. “Somos extremadamente respetuosos de todas las manifestaciones públicas, pero creemos que es necesario tener un nivel de evaluación de por qué se realiza. Esta marcha del silencio deberá tener algún objetivo, que seguramente los organizadores tendrán que explicar”, indicó.
Pero nada lo detiene en su afán por ser intendente de Resistencia. La lista deberá presentarla en abril porque en mayo son las primarias. Tendrá que discutir con la presidenta Cristina Fernández si se va del Gobierno antes o después de las internas. “En algún momento, tarde o temprano, va a volver a ocupar su cargo de gobernador”, transmitió uno de sus colaboradores a este diario. Por el momento, el mandatario interino es Juan Carlos Bacileff Ivanoff.
Ayda Ayala es apoyada por Mauricio Macri y mide alrededor de 30 puntos. Pero, según Capitanich, eso no le alcanza para ganarle al peronismo. “Está 20 puntos abajo”, suele decirle a su entorno. Coqui competirá contra el delfín de Ayala, Leonardo Sdero –su actual jefe de Gabinete–, pero hay un sector del radicalismo que pretende lanzar para ese cargo al ex gobernador radical Roy Nikisch.
“Hoy hay nueve candidatos a gobernador en el peronismo. Están esperando que llegue Coqui y ordene”, dijo a PERFIL uno de sus más estrechos colaboradores. La última vez que Capitanich viajó a Chaco fue para inaugurar un barrio de cien viviendas, pavimento y anunciar la construcción de un acueducto para el Impenetrable, que beneficiará a los vecinos de la comunidad donde falleció por desnutrición el chiquito Néstor, que formaba parte de la comunidad qom. “Se están construyendo siete acueductos, para finales de 2015, el 90% de la población va a tener agua potable”, se ufanan cerca del jefe de Gabinete.
Pero las cifras de Chaco que arroja el Indec son cuestionadas. Sobre todo, porque en la última medición, daban desocupación cero, algo difícil de creer. Cerca del funcionario aseguran que en la provincia se llegó a los 97 mil empleos registrados. A eso hay que sumarle el trabajo informal.
Capitanich arrancó en la jefatura de gabinete con la esperanza de ser uno de los presidenciables del kirchnerismo. Pero su sobreexposición lo debilitó. Ahora sólo le queda Chaco.