Este martes, la Cámara de Diputados dará inicio al debate en comisiones del proyecto de despenalización del aborto, y las diferencias entre los legisladores se hicieron notar. Tal es así que la diputada Nacional Elisa Carrió envió una carta solicitando que no se dé inicio al debate dado que “estamos transitando un tiempo sagrado para muchos argentinos”, en relación a la cercanía con Semana Santa.
“En virtud de que se ha convocado a una reunión conjunta de comisión para el día de mañana para tratar la interrupción voluntaria del embarazo, quisiera referirle que estamos transitando un tiempo sagrado para muchos argentinos y no quisiera que el inoportuno tratamiento de este tema tan sensible se convierta en un agravio para millones de judíos y cristianos” comienza el comunicado, dirigido al diputado Nacional del PRO, Daniel Lipovetzky, quien estará al frente del plenario de cuatro comisiones a cargo del debate de los proyectos que buscan la despenalización del aborto.
En el comunicado, la dirigente de la Coalición Cívica enuncia: "Daremos el debate sobre este proyecto de ley y brindaremos nuestras razones en el momento en el que haya que darlo, tenemos todo el año para hacerlo, pero empezar a tratarlo esta semana parecería una violación a los principios de tolerancia y pluralidad que exige un Estado democrático".
En diálogo telefónico con PERFIL, Daniel Lipovetzky se manifestó de manera conciliadora acerca del pedido de Carrió, y dijo que “es entendible”: “Por ese motivo mañana vamos a establecer el cronograma de trabajo, pero el debate lo vamos a comenzar el 10 de abril. La reunión es para acordar la metodología de trabajo, justamente para no citarlos durante semana santa, dado que se tuvo en cuenta esa consideración”, explicó.
A su vez, declaró que es necesario dar comienzo al debate en Diputados cuanto antes: “Teniendo en cuenta que el presidente apoyó el debate el primero de marzo no podíamos dejar pasar mucho tiempo más” explicó el Presidente de la Comisión de Legislación General de la Cámara de Diputados que junto con las de Salud, Legislación Penal y Familia conforman las cuatro Comisiones que tratarán la iniciativa.
“Este es un tema que divide a la sociedad, y también divide al Congreso. Nuestra idea es escuchar todas las voces, justamente por eso es tan importante la reunión de mañana y que cada diputado pueda proponer cuatro personas para poder exponer durante los próximos dos meses, -se prevé que en junio se lleve el proyecto al recinto- y que cada uno pueda tomar una decisión en base a eso”, dijo a este portal el diputado, a cargo del plenario.
En relación a las posiciones antagónicas, aclaró que “muchos de los que están en contra aún no lo anunciaron públicamente, y tienen una posición dudosa aún que pueden cambiar". "Yo tengo una posición pública a favor y seguramente no la voy a cambiar, de la misma forma, muchos que están en contra no van a cambiar su posición, y eso es respetable” afirmó en diálogo con este medio.
En la misma línea, agregó que para los legisladores en este debate “hay libertad de conciencia, acá cada uno va a tener que decidir independientemente de lo que decidan sus bloques, por eso es tan importante el debate parlamentario”, comentó.
Por su parte, Sergio Wisky, diputado Nacional por el PRO de Río Negro, al ser consultado sobre su opinión por el pedido de la diputada de la Coalición Cívica- ARI, comentó a PERFIL que “no considera que el debate sea agresivo” y que “espera que no sea molesto u ofensivo para los creyentes”.
En ese sentido, se mostró dispuesto a “charlarlo en el día de mañana” a la hora de la reunión. Wisky presentó una propuesta desde la alternativa oficialista para la despenalización, que propone requisitos mínimos para que la ley se cumpla en todo el país
En comunicación con este medio, el diputado y médico rionegrino sostuvo además que tiene “altas expectativas de que se inicie un debate que, de hacerse bien, va a ser una ley muy positiva”. A su vez, afirmó que “el manejo de los tiempos y de los modos será clave” para lograrlo y que es importante “entender que hay miradas diferentes, por lo que hay que buscar el método de lograr que sea una discusión de razón pública, de una política sanitaria”.