Mientras la relación del kirchnerismo con el gobernador bonaerense Daniel Scioli atraviesa su peor momento, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner sigue apoyando la "revolución ferroviaria" del presidenciable y ministro del Interior y y Transporte, Florencio Randazzo, esta vez con el anuncio de la firma del acuerdo de "financiamiento del (ferrocarril) Belgrano Cargas".
Mientras la mandataria evita cualquier pronunciamiento público en favor de un candidato del riñón kirchnerista, este es el tercer acto que comparte junto al funcionario de Chivilcoy en menos de un mes. Randazzo ató su crecimiento en las encuestas de cara a 2015 al desempeño de su gestión en los trenes y Cristina parece estar dispuesta a cederle su nombre y apoyarlo en cuanta presentación tenga participación el ministro.
La extensión de la línea San Martín, que une Retiro con Luján y la presentación de nuevos trenes fue la excusa, esta vez, para dejarse mostrar juntos y enviarle una clara señal a Scioli, quien estuvo días atrás junto al CEO del grupo Clarín, Héctor Magnetto, en el lanzamiento de un ciclo de debates y desató la furia de los kirchneristas de paladar negro.
La presidenta anunció que la firma se formalizará para el 18 de julio, cuando visite el país el presidente de China, Xi Jinping y, en un discurso que duró cerca de seis minutos en la estación Manzanares, le pidió a los trabajadores ferroviarios que "revean sus conductas" ya que "el servicio debe prestarse continuamente".
La mandataria, que tiene previsto viajar a Bolivia para participar de una cumbre de países del grupo de los 77 + China, retomó su preocupación por los conflictos sindicales y los relacionó con las políticias neoliberales: "Así como en algún momento se dijo 'ramal que para, ramal que cierra', es imprescindible que los trabajadores comprendan que el servicio debe prestarse continuamente para no permitir que surjan de vuelta argumentos (y políticas neoliberales) que muchas veces llegan a la gente, porque cuando la gente comienza a recibir un mal servicio, un servicio que se demora, que no se presta, por allí termina aceptando o aprobando cosas que finalmente lo perjudican".
En ese marco, reveló que su ministro de Economía, Axel Kicillof, le anunció "que se terminaron los contratos definitivos del financiamiento del Belgrano Cargas, que constituye algo troncal y estructural para el transporte ferroviario en Argentina y para la competitividad de la economía".
