“Nos alegra haber iniciado el camino del consenso”, dijo el economista Roberto Lavagna al publicar el borrador de un documento de 10 puntos para “buscar un diálogo” con sectores sociales. “El texto es la base para buscar el diálogo, no el objetivo final”, explicó el ex ministro de Economía al presentar el documento titulado “Lineamientos para un Gobierno de Unidad Nacional”. "Esto es resultado del diálogo real y la reflexión compartida. Seguiremos dialogando y recibiendo aportes para transformar este presente de manera real sin marketing", disparó Lavagna en la red social en la que publicó el documento.
En el documento, que Lavagna califica como “resultado del diálogo real y la reflexión compartida”, se exponen 10 puntos importantes para conseguir el consenso: (1) Convocatoria a la unidad y acuerdos básicos; (2) Instituciones fuertes, estabilidad y profundización de la democracia; (3) Un proyecto de desarrollo integral; (4) Estado promotor del crecimiento económico y la justicia social; (5) Educación de calidad para un trabajo con dignidad; (6) Gobernar es generar prosperidad y crear trabajo; (7) Federalismo y rediseño de la geografía económica; (8) Transparencia y decencia como parte fundamental del modelo de desarrollo; (9) Una nación relacionada con el mundo; (10) Derechos humanos, soberanía nacional y cooperación para la paz.
En el documento hay una explicación detallada de cada punto, donde se afirma, entre otras cosas, que la Argentina "necesita dejar atrás la lógica del ajuste y formular un proyecto de desarrollo integral que le permita desplegar la inmensa potencialidad de sus recursos humanos y naturales". Además, hace hincapié en la necesidad de "generar las condiciones para promover la inversión productiva, fortalecer el mercado interno e impulsar el comercio exterior", al tiempo que cuestiona el "aperturismo ingenuo". "Los desafíos principales de la gobernabilidad están relacionados con la creación de condiciones para mejorar la vida de las personas", señala el documento. Y agrega: "En este sentido, no se trata de un rol de mero administrador de recursos públicos que siempre serán insuficientes. Se trata de poner al Estado en un papel central como generador de la prosperidad necesaria para esos fines".
A continuación, ofrecemos un resumen del documento:
1. “Unidad, diálogo, concertación”
Ninguno de los graves problemas estructurales de la Argentina puede resolverse en el plazo de una gestión gubernamental. Todos exigen estrategias de mediano y largo plazo. Basta, por ejemplo, mencionar la acuciante responsabilidad de una reformulación integral del sistema de seguridad social, para garantizar su sustentabilidad económica, gravemente amenazada, y el mejoramiento de las prestaciones a jubilados y pensionados. Sólo esta continuidad en la acción puede evitar que la natural y deseable oscilación del péndulo de la política suponga volver periódicamente a fojas cero, con la consiguiente frustración de las expectativas de la sociedad.
2. “Equidad y la transparencia”
“Es necesario recrear a los partidos políticos como columnas del sistema democrático, de modo de que vuelvan a dar sentido a su representación, abriendo nuevos ámbitos para la participación social. Los partidos tienen que ser también actores fundamentales para la construcción de consensos y políticas de Estado, sustentos de la gobernabilidad y escuelas de formación de nuevos liderazgos, que ayude a la renovación de los elencos dirigentes. (...) Corresponde asimismo reconocer y abrir nuevos espacios relevantes para las mujeres y los jóvenes, que son parte de las nuevas transformaciones sociales y culturales que la política debe saber interpretar.
Todos los argentinos, sin distinción, con independencia de su edad, condición social o lugar de nacimiento o residencia, deben tener aseguradas las posibilidades de desarrollar sus capacidades, individual y colectivamente, de manera competitiva.
3. “Modernización de la economía”
“El mejoramiento de la competitividad empresarial tiene que sustentarse en una estrategia nacional orientada a la organización del sistema productivo argentino y de sus niveles de eficiencia institucional. El objetivo es una modernización internacionalmente competitiva de la economía argentina, que eluda el grave peligro de su reprimarización. Esto implica utilizar los beneficios derivados del despliegue inmediato de la enorme potencialidad exportadora de aquellos sectores que ya presentan ventajas competitivas, como la agroindustria, la energía, los recursos minerales y las industrias del conocimiento, para construir un sólido sistema productivo que, a partir de la transformación de las materias primas en productos de alto valor agregado, nos permita adquirir la diversificación necesaria para hacer de la Argentina un actor de primer nivel en el comercio internacional”.
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4. “Promover la actividad económica, no asfixiarla”
“El fortalecimiento de una sólida economía de mercado, basada en la iniciativa privada, es una condición indispensable para la el desarrollo nacional. Esto exige la plena liberación de toda la enorme capacidad creadora de lnuestras fuerzas productivas. La misión del Estado es promover la actividad económica, no asfixiarla. (…) Es preciso terminar con la improvisación en la administración de un Estado convertido en botín de guerra de la política y elegir funcionarios públicos competentes, designados por su idoneidad profesional y no por su filiación partidaria o sus vinculaciones personales o empresarias para sean funcionales a esos intereses”.
5. “Igualdad de oportunidades”
“La vertiginosa aceleración de los adelantos científicos y los cambios tecnológicos representan un gigantesco desafío al mundo del trabajo. La respuesta es encarar una verdadera Revolución de la Educación y del Trabajo que promueva las condiciones para que todas las personas puedan participar activamente de los beneficios de este nuevo tiempo. (…) Todos los argentinos, sin distinción, con independencia de su edad, condición social o lugar de nacimiento o residencia, deben tener aseguradas las posibilidades de desarrollar sus capacidades, individual y colectivamente, de manera competitiva. El nuevo nombre de la justicia social es la igualdad de oportunidades y el único camino es la educación.
Es necesario crear un “cuarto nivel” educativo, más allá del sistema formal., asociado al mundo del trabajo, para incorporar nuevos conocimientos y capacidades, Roberto Lavagna
6. “Gobernar es crear trabajo”
“Gobernar también es crear trabajo. La justicia social manda la creación de trabajo formal y digno para todas las personas. (…) A fin de posibilitar una mayor generación de empleo y condiciones más favorables para la inversión, cuando la oportunidad lo indique, esto es en momentos de expansión de la economía, será necesario encarar una modernización en el régimen de trabajo, que en cada una de las actividades productivas tendrá que ser consensuada entre las entidades empresarias y las organizaciones sindicales”.
“… exige que el Estado no sólo genere condiciones para la igualdad de oportunidades, sino que también atienda al hecho de que las víctimas de las desigualdades sociales preexistentes requieren un tratamiento especial y prioritario, para que ellos y sus familias tengan la posibilidad de salir definitivamente de la pobreza. En ese sentido, es prioritario encontrar los mecanismos financieros que posibiliten la implementación efectiva de la ley que establece el acceso a la propiedad de la tierra y la vivienda digna para los centenares de miles familias que no tienen por si solas la posibilidad de acceder a ellas”.
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7. “Geografía económica”
“Tenemos que rediseñar la geografía económica argentina, para transformar la actual estructura centralista y macrocefálica y avanzar en un camino que posibilite el desarrollo autónomo de todas las regiones y provincias argentinas, de manera de generar las bases materiales de un federalismo real, que no se limite a la letra constitucional sino que se verifique en el campo de los hechos. En esas condiciones, es necesario y posible encarar una vasta tarea de ampliación de nuestra fronteras productivas, a partir de la realización de múltiples obras de infraestructura que permitan impulsar una nueva epopeya colonizadora del territorio nacional., de dimensiones semejantes a la que, desde mediados del siglo XIX, sentaron las bases de la Argentina del primer centenario”.
“Resulta fundamental avanzar en la materialización de las conexiones bioceánicas. Históricamente, la economía argentina tuvo la mirada puesta casi exclusivamente en la frontera atlántica, que la une con Europa. Ahora tiene que profundizar su frontera americana que nos vincula con los países vecinos y a través de Chile con el Océano Pacífico, que es la vía de comunicación con los grandes mercados del sudeste asiático, principal locomotora hoy de la economía mundial. (…) Esta política no supone en absoluto promover la exclusión de quienes deseen vivir bajo la ley en suelo argentino, sino el propósito de impulsar un ordenamiento racional del desarrollo urbano”.
8. “Transparencia y decencia”
“En la Argentina la corrupción se ha transformado en un fenómeno de carácter sistémico. Combatirla demanda una respuesta de fondo, acorde con la gravísima amenaza que significa para la democracia. No corresponde ignorar que detrás de cada funcionario corrupto hay un empresario que paga y se distribuyen los beneficios. La ley tiene que ser igual para todos y su cumplimiento irrestricto una obligación ineludible que no admite excepciones. El mayor incentivo para la corrupción es la impunidad, cuya existencia es responsabilidad de los magistrados. Frente a ello, el Poder Judicial debe producir una profunda recomposición en el propio cuerpo, para poder desarrollar una acción despojada de sospechas que brinde, con eficacia y sin demoras, las respuestas que reclama la ciudadanía”.
9. “Defender la soberanía y asegurar la paz”
“Las instituciones públicas tienen que definir, con una urgencia impostergable, una estrategia política eficaz, integral, compleja, multidisciplinaria y coordinada frente al delito, para brindar a los argentinos la seguridad como un derecho fundamental que tiene al Estado como garante y protagonista. En este sentido, se requiere un fuerte énfasis en las tareas de prevención del delito, que exige reforzar la inteligencia criminal y lograr una mayor eficiencia en la lucha contra los delitos suprajurisdiccionales. No se trata sólo de garantizar la indispensable protección de nuestras fronteras, sino de establecer mecanismos trasversales y transnacionales para proteger a la sociedad de estos flagelos”.
El mayor incentivo para la corrupción es la impunidad, cuya existencia es responsabilidad de los magistrados, Roberto Lavagna
“También es preciso avanzar en la incorporación de nuevas tecnologías y en el establecimiento de mecanismos eficientes de control ciudadano sobre las fuerzas de seguridad, para enfrentar la corrupción, y sobre los servicios de inteligencia, para evitar que sean empleados ilegalmente con fines de política interna. Corresponde asimismo impulsar una profunda transformación del sistema penitenciario, para que las cárceles cumplan con su misión de promover la reinserción social y no sean un postgrado del delito”.
10. “Presencia en el mundo”
“El nuevo escenario mundial está caracterizado por el fin de la unipolaridad estadounidense, el ascenso de China y una creciente puja por la hegemonía planetaria. Para afrontar esa realidad, es preciso enfatizar que la comprensión de la globalización como un fenómeno estructural no nos puede llevar a su ligera aceptación, ni a caer en un “globalismo” ingenuo que muchos predican pero que, en la práctica, tiene una aplicación demasiado limitada. (…) La política exterior tiene que poner el acento en la construcción de ese eje regional, concebido con un criterio de regionalismo abierto, como impulsor activo de la unidad latinoamericana. (…) La Argentina debe que aportar algo más al mundo que una presencia muda y temerosa. Puede y debe adquirir reconocimiento internacional con una posición activa en defensa de la paz mundial, un fuerte protagonismo en la defensa de los derechos humanos y una posición decidida a favor de la protección del medio ambiente.”
D.S.