Desde el pedido de sobreseimiento por parte de la defensa de Mauricio Macri, el Presidente electo no para de recibir buenas noticias respecto de la causa por las "escuchas ilegales". Ayer el juez federal Sebastián Casanello dio por cerrada la investigación contra el presidente electo y, tras el dictamen del fiscal Jorge Di Lello, deberá resolver un pedido de la defensa para que se clausure la imputación en su contra.
Di Lello reveló este martes en diálogo con el programa Guetap por radio Vorterix, que el jueves emitirá su dictamen. El fiscal tiene tres opciones de entre las cuales decidir: "sobreseer, pedir la elevación a juicio junto con los demás implicados o pedir más medidas".
Sin embargo, el fiscal ya anticipó que "no pedirá más pruebas".
Y explicó: "El expedientes llegó el jueves a última hora. Viernes no se trabajó. Y ayer empezamos a poner en orden también y terminar todos los coletazos de lo que fue todo el proceso electoral, denuncias, informes, etc. Y bueno, hoy junto con mis compañeros de trabajo que llevamos la causa nos pondremos a analizar qué es lo que vamos a dictaminar. Las posibilidades son tres: sobreseer, pedir la elevación junto con los demás que están elevados o pedir más medidas".
"Mi opinión es que más medidas no tienen sentido porque se pueden producir si se necesitan en el juicio oral. Son dos las opciones entonces que habrá que verlas. Sería contradictorio conmigo mismo si pidiera más medidas", añadió.
Di Lello remarcó que luego de su dictamen, Casanello definirá. "El juez Casanello resuelve. Podríamos volver a la misma situación que hace dos años, que cualquiera de las partes apelara lo que el juez resolviese. De todas maneras, no sé de qué manera varió pero lo cierto es que la Cámara nunca me dio la razón cuando yo pedí la elevación a juicio porque faltaban medidas. Sería contradictorio conmigo mismo, si ahora pido más medidas. Sé que hay medidas producidas y llegó el momento de pronunciarse".
Ante la pregunta de porqué no se resolvió este caso antes, respondió: "De acuerdo, pero eso, el pedido lo hace la defensa, y esto motiva la puesta en marcha nuevamente. No puedo dar más datos. Seis años lleva la causa de las escuchas".
Luego de que todas las partes formulen su requerimiento, el juez Casanello deberá decidir si hace lugar al pedido de sobreseimiento o lo rechaza y manda a juicio oral a Macri.
La causa. Macri está procesado por una estructura enquistada en el gobierno porteño contra adversarios políticos y familiares: fue el único en una lista de procesados que no fue enviado a juicio oral y su situación quedó en espera de averiguaciones que el juez quería hacer en Estados Unidos, país que se negó a entregar esa información. La causa empezó en 2009 cuando Burstein estaba de viaje en Nueva York con la presidenta Cristina Fernández para participar de una asamblea en la ONU y un agente de la SIDE llamó a su casa del barrio de Almagro y habló con su hija diciéndole que el teléfono de su padre había sido "pinchado". Según Burstein, el desconocido dijo que había sido por orden del Jorge "Fino" Palacios, entonces jefe de la Policía Metropolitana a quien el marido de una victima de la AMIA denunciaba por el desvío de la "pista siria" en el atentado.